El mariscal de campo Tom Brady llevó a Patriotas de Nueva Inglaterra a ganar su cuarto anillo de Súper Tazón, al imponerse por 28-24 a Halcones Marinos de Seattle, gracias a una providencial intercepción en la zona de anotación por parte del novato Malcolm Butler.

El esquinero egresado de la Universidad de Alabama se vistió de héroe al interceptar sobre la línea de touchdown al mariscal de campo de Halcones Marinos de Seattle, Russell Wilson, para arrebatarle una victoria que parecía prácticamente segura.

Brady le consiguió a su entrenador en jefe, Bill Belichick, cuatro pases de anotación en este encuentro, de 11 yardas con Brandon LaFell y de 22 con Rob Gronkowski en el segundo episodio, y de cuatro con Danny Amendola y de tres con Julian Edelman en el tercero.

Patriotas, visitante administrativo, tuvo la primera oportunidad al ataque, no obstante, la defensiva de Halcones Marinos hizo honor a su fama y no tuvo problema para detener a Tom Brady y compañía, a quienes sólo les prestó el ovoide por tres minutos.

Pero de poco le valió el esfuerzo, ya que Bill Belichick tenía el antídoto perfecto contra Russell Wilson y Marshawn Lynch, con sus apoyadores cubriendo rápidamente los huecos en la línea ofensiva, con lo cual tampoco tardaron en detener el ataque “emplumado”.

Parecía que Nueva Inglaterra sería el primero en ponerle puntos a la pizarra, sin embargo, cuando se encontraban a sólo 10 yardas de la “zona prometida”, Brady tiró su tercera intercepción en estos playoffs, en manos de Jeremy Lane, quien en buen momento consiguió su primera de la campaña, justo sobre la línea de touchdown.

No obstante, con la defensiva secundaria de los “Pats” en completo control de la parte profunda del campo, ni Lynch ni Wilson podían llegar muy lejos y, en acciones ya del segundo cuarto, fueron incapaces de avanzar más de 12 yardas, con lo que dejaron al rival en excelente posición de campo.

El colmillo largo y retorcido de Belichick comenzó a notarse en verdad en este segundo capítulo, cuando su ofensiva comenzó a arrastrar de fea manera a la mejor defensiva de la temporada regular, con pases cortos y rápidos que dejaban a sus receptores en buena posición para ganar más yardas, tras hacer la atrapada.

La estrategia le rindió excelentes dividendos a los de azul y plata y tras dar un primer aviso cuando Brady buscó a Rob Gronkowski en la zona de anotación, dieron el primer golpe en el pasto del Estadio de la Universidad de Phoenix, para irse adelante en el marcador.

El egresado de la Universidad de Michigan se encargó de ponerle los primeros puntos a la pizarra, con un balazo de 11 yardas que encontró a Brandon LaFell, apenas a un paso de la línea de gol, donde los profundos Tharold Simon y Earl Thomas ya no pudieron evitar el 7-0 para los campeones de la Conferencia Americana.

Por fin, el head coach de los alados, Pete Carroll, encontró la forma de hacerle daño a la defensiva de Patriotas y tuvo en el relativamente desconocido receptor Chris Matthews al arma secreta que los puso en el camino a la anotación, con una atrapada de 44 yardas.

Con el ovoide en la 11 de territorio enemigo, “Beast Mode” Lynch se encargó del resto del trabajo y en tres jugadas más hizo lo que mejor sabe hacer: “cargar” defensivos rivales hasta llegar a la zona de anotación, con acarreo de tres yardas que niveló la balanza en 7-7.

Tras más de 25 minutos de un juego con ritmo semilento, los últimos 2:30 minutos de la primera mitad resultaron trepidantes, con ambos equipos logrando sendos arribos a la “zona prometida”, con lo que todo habría de decidirse en la segunda parte.

Durante todo el primer cuarto y la mayor parte del segundo, Gronkowski había sido más que un señuelo para abrirle espacios a LaFell y Danny Amendola, sin embargo, un ligero error del coordinador defensivo de Seattle, Dan Quinn, le abrió la puerta al estelar ala cerrada para entrar a la zona de anotación.

“Gronk” recibió un respiro de las férreas coberturas de Kam Chancellor y Earl Thomas, lo cual aprovechó Brady para quemar al apoyador K.J. Wright, quien se quedó con la nada fácil labor de detener al ala cerrada y éste no tuvo problemas para dejarlo atrás y hacer bueno un envío de 22 yd en la zona de anotación.

Con el marcador 7-14 en su contra y sólo 31 segundos en el marcador, casi todo mundo daba por terminada la primera mitad, todo mundo menos Pete Carroll, quien hizo gala de astucia y valentía dejando de lado un tanto a Lynch para llevar a su equipo hasta la 11 del rival.

Seis segundos en el marcador hacían pensar que Seattle iría por el gol de campo, sin embargo, Carroll se la jugó a todo o nada con un pase de Wilson directo a la zona, donde hizo conexión de 11 yardas con Matthews, quien hizo bueno el primer pase de anotación de su carrera para el empate de 14-14 al medio tiempo.

Halcones Marinos inició a tambor batiente el tercer episodio, en el que tuvo la primera oportunidad a la ofensiva y la supo aprovechar con seis jugadas que pusieron al pateador Steven Hauschka en la yarda ocho de Nueva Inglaterra, desde donde convirtió un gol de campo de 27 yardas, que les dio la ventaja por primera vez en el juego. 17-14.

Con un inesperado cambio en su filosofía defensiva, al implementar dos safeties al fondo del campo, Seattle por fin pudo contener a Tom Brady, con intercepción incluida, ahora a manos del apoyador Bobby Wagner, en la yarda 40 de territorio “neoinglés”, con devolución de seis yd.

Gracias a la excelente posición de campo que le obsequió su defensiva, el ataque de Wilson no tuvo empachó alguno en lanzarse a la yugular y sacándole provecho al “factor x” que representaba el hasta ahora desconocido Chris Matthews pusieron siete puntos más a su lado de la pizarra.

Con Lynch perfectamente maniatado por la defensiva de los “Pats”, fue el ataque aéreo de Wilson el que dio la cara por los “emplumados” y en esta ocasión le tocó a Doug Baldwin entrar a la zona de anotación, con pase de tres yardas, al aprovechar una confusión en la secundaria rival en la cobertura de una trayectoria cruzada.

Al verse abajo en el marcador, la defensiva de Nueva Inglaterra, dirigida por Matt Patricia, apretó bien en la línea de scrimmage con sus apoyadores y consiguió la penetración que necesitaba para volverle a llegar a Wilson y parar el ataque de Halcones Marinos.

Así, aunque la defensa esmeralda por fin consiguió capturar a Brady, éste se cobró el golpe en grande, llevando a los suyos hasta la yarda tres, en combinación con Julian Edelman, y una vez ahí encontró conexión con Danny Ammendola, para poner los cartones 21-24 con envío de cuatro yd en el fondo de la zona.

Aunque se tardaron, los muchachos de Belichick supieron sacudirse el golpe anímico que fue el empate en los últimos segundos de la primera mitad y volvieron en grande, con un Brady haciendo gala de sangre fría, arriesgando el balón en jugadas que a la postre resultaron clave en el touchdown del 28-24.

La versatilidad del ataque aéreo de los “Pats” se hizo patente cuando Brady conectó su cuarto envío anotador del partido con un receptor diferente y en esta ocasión la oportunidad fue de Julian Edelman de cubrirse de gloria, con un pase de tres yd justo sobre la línea.

Con 2:02 minutos en el reloj, Wilson inició la serie ofensiva de su vida, la cual se mantuvo con vida gracias a una milagrosa atrapada de Jevon Kearse, quien, de espaldas en el suelo, se quedó con un balón que le había rebotado en las manos y luego en una pierna, para dejar a su equipo en la yarda cinco.

Sin embargo, luego de la jugada heroica vino el trágico error cuando, en la yarda uno, el coordinador ofensivo de Seattle Darrell Bavell quiso sorprender con un pase a la banda en vez de ir con el imparable “Beast Mode”, lo cual propició la primera intercepción en la carrera del novato Butler, quien así se vistió de héroe.

Tom Brady terminó el partido con 37 pases completos en 50 intentos, récord del Súper Tazón, con ganancia de 328 yardas, cuatro pases de anotación y dos intercepciones.

Russell Wilson, por su parte, tuvo una actuación más que aceptable al completar 12 de 21, con yardaje de 247, dos envíos a las diagonales y uno interceptado.