Como medida de desesperación, este lunes tomaron clases en el zócalo de la ciudad más de una veintena de niños sordomudos, luego de que este fin de mes tienen que desalojar su escuela por falta de pago en la renta.

Los estudiantes y sus maestros sacaron las bancas y el pizarrón para pedir apoyo no sólo a las autoridades del gobierno estatal y municipal, sino a la misma ciudadanía, ya que no tienen un sólo peso para seguir impartiendo las clases.

Los alumnos toman clases en la Asociación Cultural, Recreativa y Educativa para Sordos de Puebla, organismo civil que sobrevive gracias a cooperaciones particulares, pero sobre todo a apoyos de los gobiernos, los cuales fueron recortados con el inicio de la actual administración de Rafael Moreno Valle.

El estado de Puebla carece de centros educativos especializados para la atención de más de 14 mil niños sordos, quienes al concluir la educación primaria, la gran mayoría se ve forzado a salir de las aulas.

Tener este padecimiento en Puebla implica aparte de sufrir por la condición física, pasar malestares por discriminación, aunado a que no pueden concluir estudios ni siquiera de nivel básico, al menos en instituciones públicas.

El gobierno del estado y el ayuntamiento quitaron todo apoyo, como despensas, entrega de aparatos auditivos y subsidio para el pago de renta al organismo que beneficia a personas de escasos recursos.

La Casa del Sordo será desalojada este fin de mes al adeudar más de 35 mil pesos de renta, producto de cinco meses de renta, afectando a más de 189 niños y adultos que estudian en la única escuela para este sector en Puebla.

La Casa del Sordo está ubicada en el viejo edificio de la 7 Poniente 309, donde alquila apenas cinco cuartos, los que fueron acondicionados como salones de clase y una cocina la que se utiliza para alimentar a los pequeños.

La mayoría de los estudiantes de muy escasos recursos, tienen que pagar 80 pesos semanales como cuota de recuperación, pero la gran mayoría no lo hace, ya que ni siquiera tienen trabajo sus padres o los mismos adultos que toman clases, por lo que se les condona el pago.

También la Asociación de Sordos ha solicitado al Instituto Estatal para la Educación de los Adultos (IEEA) la valides de los estudios, situación que está en trámite.

Los estudiantes, que van desde los cuatro años de edad, aprenden en esta escuela no sólo a comunicarse con el lenguaje a señas, sino también a leer y escribir, ya que carecen de estudios como primaria por no poder entrar a alguna escuela “de educación normal”, por su problema físico.

“Le estamos dando el servicio a 168 sordos adultos y 21 niños, hemos crecido poco a poco, ahora se les enseña lenguaje de señas, alfabetización y lectoescritura. El sordo nunca va a poder estar en una escuela especial porque ahí tienen a todos revueltos y para nosotros es mejor que el niño este con gente de su misma discapacidad para su mejor desarrollo.”

 
La renta

Puente Romero, explicó que la renta del inmueble era pagada por el gobierno de Mario Marín Torres, específicamente de parte de la Secretaría de Gobernación cuando estaba al frente Mario Montero Serrano.

Sin embargo, a la llegada de Valentín Meneses Rojas, empezaron los problemas de pago, el que fue suspendido definitivamente en el mes de octubre del 2010 y ahora el actual gobierno estatal no quiere seguir erogando.

Indicó que ante el crecimiento del número de  estudiantes en los últimos meses, han solicitado al ayuntamiento de Puebla y al gobierno estatal que le otorgue un edificio donde puedan dar el servicio, sin embargo las respuestas han sido negativas.

 
Labor altruista

Ana Isabel Puente Romero, representante legal de una organización fundada el 8 de agosto de 1997, dijo que llevan una ardua labor permanente para capacitarlos en talleres.
“Les enseñamos a fabricar sus propios productos y a darles herramientas para subsistir, nunca tuvimos un espacio para las actividades propias de su desarrollo.”

Indicó que gracias al apoyo de la Secretaría de Gobernación, esta asociación renta de lo que hoy se conoce como “La casa del sordo” en la 7 Poniente 309 del Centro Histórico.

“Ante este problema se refleja una ironía implícita ante una discapacidad que no se ve, y que también se presta al surgimiento de vivales que se hacen pasar por sordos para sus propios fines.

”Esto ha devenido en la resistencia ante las necesidades de personas sordas, la discriminación se da en todos los niveles sociales y de todas las formas posibles”, dijo la activista en los derechos de los sordomudos.

“Hasta el día de hoy, no se quiere reconocer al sordomudo como discapacitado ni social ni laboralmente”, concluyó

 

El sueño

El secretario general del Setep, Armando García Avendaño, informó propusieron durante un foro educativo, reformas en materia educativa para proteger a este sector vulnerable.

Indicó que plantearon cuatro propuestas fundamentales, como la creación de escuelas para sordos, capacitación a docentes, implementación de educación media superior obligatoria y publicación de investigaciones realizadas por maestros del Setep.

“La propuesta para los alumnos sordos, que ellos a nivel básico, primaria tienen la atención, pero en secundaria y media superior no existe una sola institución donde puedan continuar sus estudios de secundaria o bachiller.

”Ahí se pierden, de alguna manera tenemos más de 14 mil alumnos sordos, de los cuales hay un promedio de 35 % sin instrucción pública, con el 2.3 en deserción en primaria y la secundaria inconclusa.

”Estos alumnos se pierden, por lo que proponemos que se implementen o creen instituciones especializadas para que los sordos o hipo acústicos puedan desarrollar su escolaridad a nivel medio superior.”

Mencionó que a nivel particular existe una institución que si da las clases especiales, pero con cuotas son muy altas. “Es obvio que no todo mundo tiene acceso a esto, la mayor parte son de un nivel bajo en economía”.

Claudia López Castillo, miembro activo del Setep, comentó que el estado de Puebla es el séptimo estado con mayor número de personas con discapacidad y ocupa entre los primeros cinco en el nivel altísimo de discriminación.

Indicó que esto repercute en la educación, porque los Centros de Atención Múltiple también tienen un número reducido de docentes especializados.

Detalló que en Puebla existen apenas hay mil 900 docentes capacitados en atención para personas con discapacitadas, pero de ellos, sólo 112 son especialistas en audición y 18 intérpretes de señas mexicanas. “Para cinco mil escuelas de educación básica no se dan abasto”, comentó

Reveló que por otro lado, la integración educativa que marca la ley, les pide que sea la atención de forma individualizada, con una capacidad lingüística de más de mil palabras.

“Entonces estos chicos no desarrollan esas habilidades, ni destrezas de comprensión o referentes lingüísticos hasta que llegan al sexto de primaria.”

“Ahí hay otro factor, si cumplen más de 15 años, los sacan de la institución, o los capacitan para un oficio o definitivamente ya no estudian”, dijo.

Indicó que algunas escuelas particulares apoyan a los estudiantes de este tipo, pero no tienen registro oficial, entonces de alguna manera tienen que buscar el anexo de otra institución que si tenga registro.

“En Puebla hay un rezago escolar en el subsistema de educación especial, para adultos e indígenas, muy marcado que no se ha podido abatir, por eso la urgencia de la creación de las instituciones para que continúen con la escolarización de técnicas especializadas en el nivelo de secundaria y para que posteriormente se puedan integrar con las herramientas para que salgan adelante y la propia comunidad escolar sean los que se adapten.”

Indicó que para estas personas, como los niños sordos, la educación debe ser personalizada de cualquier manera.

“Hay 14 mil 583 alumnos en discapacidad auditiva, el 82 por ciento de los que tienen alguna discapacidad a manera general, requieren de atención pero dependen de familiares y amigos, o sea que más del 80 por ciento de personas con alguna discapacidad no continúan sus estudios”, dijo.


Discriminación

Arturo Zárate Jiménez, asesor de la Asociación Cultural, Recreativa y Educativa para Sordos de Puebla, señaló que es muy difícil la situación que están atravesando

“Los propios padres se avergüenzan de la discapacidad de sus hijos e incluso los llegan a creer débiles mentales, por un lado los llaman retrasados y por otro su discapacidad no es reconocida. En términos generales hay una resistencia extraña contra el sordomudo y hasta son mal vistos por la sociedad.”

Muchos sordomudos permanecen ocultos, no son reportados como tal por sus familiares y los menos son atendidos en sus propias casas gracias a que cuentan con los recursos para ello.

“El problema o discriminación lo ves todos los días en las calles, donde no hay señalética para este tipo de discapacidad ni programas ni escuelas mucho menos una bolsa de trabajo.

”Pero lo peor ocurre cuando un sordo es empleado, como regularmente es muy competitivo, termina por ser corrido por sus propios compañeros, obligado a retirarse ante el rechazo social”, señaló Arturo Zárate.

“El caso más severo en contra de esta población ocurre con los operadores del transporte público, quienes en primera instancia y por orden gubernamental, no deberían cobrarles el pasaje.

”Así se supone que debería ser, pero en la realidad es que algunos choferes terminaron por agredir y hasta golpear a los sordomudos. En algunos casos hasta les rompieron las credenciales que les expedía  en el mismo DIF estatal, mínimo tres de cada diez sufrieron agresiones de los transportistas.”