El nuevo uniforme único del sistema escolar poblano generó opiniones encontradas entre los padres de familia, que van desde su reprobación por el escudo oficial que impuso la autoridad estatal, hasta el respaldo total de la casaca azul presentada en días pasados, porque muchos dijeron que les representará ahorros importantes en el gasto familiar.
Padres de familia de escuelas públicas de la capital aseguraron que ya se acercaron a las tiendas aledañas a los centros educativos que venden uniformes y encuentran que éste todavía no tiene un costo, porque llevará un distintivo de cada institución.
“Entonces vemos que el negocio prevalecerá y no se reducirán sustantivamente los costos, como anunciaron los representantes de la Secretaría de Educación Pública”, dijo María Luisa, madre de familia del Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec.
Otro punto que destacaron los padres de familia afuera del Centro Escolar Morelos es que los directivos ya impusieron un color para las prendas que los menores de edad y los jóvenes llevarán debajo de la casaca; sin embargo, afirmaron que la casaca les viene cómodo para la economía familiar.
“Pero no sabemos qué hacer para la temporada de lluvias y cuando bajen las temperaturas, porque los niños necesitan venir bien abrigados a la escuela”.
Algunos padres de familia que platicaron con Intolerancia Diario coincidieron en que la medida es buena y que los estudiantes pueden usar un suéter debajo de la prenda autorizada por el gobierno, sobre todo en escuelas donde la compra de uniformes representaba un gasto excesivo.
“En la escuela de mis hijos ya calculamos un ahorro de más de 900 pesos por cada estudiante en los uniformes”, dijo Diana, madre de estudiantes del CENHCH.
Pese a lo anterior, la mayoría de los padres y madres de familia están en desacuerdo con la medida de cambiar los uniformes, porque sus hijos ya tienen las prendas que autorizó el gobierno anterior y no están dispuestos a realizar un nuevo gasto para la casaca que se presentó oficialmente ante los poblanos, por eso coincidieron en que en escuelas grandes —como los centros escolares— el uniforme no quedará igual, porque siempre imponen cambios que les permiten la identificación del resto de las instituciones.
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Aunque entre algunos tutores hay aceptación de la prenda avalada por el gobierno, la mayoría de ellos encuentra muchos inconvenientes, donde el más reiterado es que les molesta que la prenda tenga publicidad gubernamental.
“Aunque digan que no, eso influye en la sociedad y más cuando hay elecciones para elegir autoridades”, dijo Alejandra, madre de familia del Centro Escolar Morelos.
Incluso, entre muchos padres de familia el tema del nuevo uniforme se convirtió en asunto de burla, porque dijeron que sus hijos “se verán como botargas del gobierno poblano; lo peor, es que no les pagarán por hacerlo”.
