Voceadores del Centro Histórico de Puebla denunciaron que el proyecto del Corredor Turístico Fuertes-Catedral dejará sin empleos a por lo menos 16 familias completas porque se ha planeado la desaparición o en su caso la reubicación de expendios de periódicos que por más de 80 años han estado en el primer cuadro de la ciudad.
Lo anterior, luego de que el pasado viernes 21 de septiembre recibieron un documento en el que tienen como ultimátum 5 días hábiles para presentar sus licencias de funcionamiento, número y alineación oficial, estudio de impacto ambiental, entre otros requisitos que nunca se habían solicitado y que además tratan de hacerlos ver como establecimientos comerciales.
En conferencia de prensa, tres agrupaciones de los voceadores denunciaron que tras 80 años de mantenerse en la zona del primer cuadro de la ciudad, el ayuntamiento de Puebla tomó como pretexto el programa de modernización del Centro Histórico y el gobierno del estado con el Corredor Turístico Fuertes-Catedral para tratar de desaparecer a por lo menos 8 expendios de periódicos y revistas ya que supuestamente afectan el tramo de una de las rutas de este proyecto conjunto.
Uno de los líderes del sindicato de este gremio, Jesús Bermúdez y Martínez explicó que la semana pasada fueron notificados de la urgencia de presentar a más tardar en 5 días hábiles la documentación correspondiente que los acredite como voceadores y dueños de cada uno de los expendios, con la intención de no removerlos, pues con el proyecto de modernización saldrán afectados.
Detalló que la molestia principal es que en ningún momento la autoridad municipal buscó un acercamiento o diálogo previo con las tres agrupaciones, sino que el viernes pasado, sorpresivamente representantes municipales les entregaron las notificaciones para que en tan sólo cinco días hábiles documentaran la propiedad de cada una de estas casetas.
Los voceadores manifestaron que es de conocimiento de la autoridad municipal que en 80 años nunca han contado con un permiso de funcionamiento ya que siempre se han regido por leyes donde se les señala que sin problema alguno puede exhibir la prensa escrita.
Sin embargo es la primera administración, que les está exigiendo de la noche a la mañana una serie de permisos, como el uso de suelo, licencia de funcionamiento, y el pago correspondiente, documentación que por lógica no cuentan en sus manos.
“Nos dan como ultimátum cinco días para que presentemos esos documentos, sabiendo que no los tenemos, nuestra inconformidad es que no nos toman en cuenta aún cuando durante más de 80 años que estamos en la calle, y no nos incluyen en los proyectos que quiere hacer el gobierno.”
El secretario general del Sindicato de Voceadores dejó en claro que los voceadores de Puebla no están en contra del desarrollo y rescate del Centro Histórico, ya que incluso celebran y aplauden la determinación de las actuales autoridades municipales y estatales de regresarle la vida al primer cuadro de la ciudad.
Acompañado por José Carlos López, de la Asociación Única de Voceadores del estado de Puebla, advirtieron que no pueden apoyar si es a costa de quitarles su fuente de trabajo, pues el municipio no les da una mejor opción, sino lo único que buscan es quitarlos de manera definitiva, lo cual no permitirán.
“Aquí los voceadores de Puebla obviamente de eso dependen nuestras familias, durante toda una vida, lo único que sabemos hacer es vender periódicos y revistas, y nos quitan nuestra fuente de trabajo.”
Aseguró que siempre han sido personas de paz, pues nunca se han destacado por ser personas conflictivas, sin embargo advirtieron que defenderán a como dé lugar sus espacios de trabajo, ya que no son delincuentes, sino el ser voceador se trata de un trabajo honesto.
Explicaron que si existen casetas abandonadas es consecuencia de que algunos voceadores se han enfermado por el paso de los años, lo cual hace que por la edad tan avanzada se les haga imposible seguir trabajando.
“Si están muy anchas, que se recorten, que si están muy largas, que se recorten, que se haga un proyecto donde sean funcionales para vender periódicos y revistas.”
Por lo tanto la petición es clara, que sean tomados en cuenta y que en lugar de obligarlos a cambiar de lugar o eliminar las casetas que “estorban” en la ruta turísticas, que los incluyan y que adecuen sus casetas a la armonía del proyecto del embellecimiento.