En ese contexto, el funcionario de esa dependencia paraestatal sectorizada por la Secretaría de Educación Pública (SEP) aseguró que en la actualidad sí se trabaja por competencias, lo que se entiende como un cambio de actitud de los sindicatos, sobre todo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), en torno a las evaluaciones por competencias y las certificaciones, “encontramos en la actualidad un cambio notable, creemos que vamos por el camino correcto”.
El director general de Conocer reveló que en la actualidad, en el área de formación por competencias, trabajan con sindicatos, con empresas y con el sector gubernamental, y todos están involucrados en esa dinámica, pero el problema para el estado de Puebla es similar a otras entidades, porque hay una gran cantidad de personas fuera de los centros poblacionales, “son regiones muy aisladas y marginadas, por lo que es muy difícil llevar allá educación y competencias”.
“Hay avances, porque la educación media superior ya trabaja por competencias, con la reforma integral federal, pero además se trabaja para llevarla a la educación básica. Solamente las universidades están más reticentes con el modelo porque sienten que la palabra competencia elimina el contenido de las disciplinas, cuando no es el caso, pero están acostumbradas a trabajar en torno a disciplinas.”
En la actualidad —dijo Salvador Malo Álvarez— se recomienda formar a los estudiantes con destrezas y actitudes, pero el avance es que ya se aceptan las competencias, que están contenidas en el Plan Nacional de Desarrollo y están dentro de los contenidos educativos del país, ahora sí se alinean los discursos con los hechos.
Formación incipiente
“La formación por competencias apenas está entrando en la sociedad actual, porque hay más personas fuera del sistema educativo que dentro, porque dentro del sistema escolar están 35 millones y fuera unos 50 millones, y es necesario darles competencias, porque la vida actual exige la superación”, destacó Malo Álvarez.