El regreso a clases, el próximo 30 de agosto, es obligatorio para todos los maestros del sistema escolar poblano, incluso, para los que presenten alguna comorbilidad en relación a la pandemia provocada por el COVID-19.
Sin embargo, algunos grupos de docentes de las dos secciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), decidieron recurrir a los amparos, porque muchos de ellos, presentan diabetes e hipertensión arterial.
Desde la SEP, mandaron los calendarios y no todos los docentes se presentarán los 5 días de la semana, sino que lo harán en días diferentes, en dos bloques, sin embargo, los grupos quedaron con 75 estudiantes, en un mismo salón.
El trabajo en línea para docentes que presentan alguna enfermedad comprobable, no está permitido, “todos regresan, todos sin excepción”, dijo un docente de la sección 23 del SNTE, que recurrió a la gracia del anonimato, por temer a represalias.
Otro docente, reveló que, desde las 2 secciones del SNTE, intentaron solicitar que los profesores con alguna enfermedad, impartieran clases en línea, sin embargo, tampoco fueron escuchados.