El futuro de la población mundial es urbano y de acuerdo a datos de la ONU, en los últimos 30 años, la sociedad actual pasó de lo rural a lo urbano.
El académico de la Ibero Puebla, Francisco Valverde, aseguró que, hoy en día, más del 55 por ciento de las poblaciones son urbanas, “el 82 por ciento de la población está en procesos de urbanización”.
Durante la presentación del programa de doctorado en Hábitat y Sustentabilidad de la Ibero Puebla, aseguró que, las ciudades siguen siendo mas atractivas y se pierde la vocación de lo rural.
"Todo lo urbanizamos y convertimos en espacio urbano, por eso, si no se ponen herramientas adecuadas alcanzarán trazos complicados de crecimiento".
Una de cada 8 personas vive en 33 megaciudades con más de 10 millones de habitantes, por eso, añadió la importancia del desarrollo, el cual depende de la gestión exitosa de las ciudades.
Los procesos de urbanización aumentan a tasas muy altas en los países, por eso, destacó la importancia de fortalecer los vínculos entre zonas urbanas y rurales.
Por otro lado, expresó que el desarrollo sustentable muestra que hay una crisis doble: la ambiental y la sociedad.
Por su parte, la coordinadora de la Especialidad en Gestión Integral del Riesgo de la Ibero Puebla, Lorena Cabrera Montiel, reveló que, el 79 por ciento de la población del país es urbana, mientras que, la rural presenta una mayor marginalidad.
Dijo que, la población urbana crece a ritmo más alto que la población, por ejemplo, la región de Puebla-Tlaxcala creció hasta 10 veces más, pero eso trae un consumo ineficaz e inequitativo del suelo.
Explicó que en el acceso a la vivienda existe una distribución territorial injusta, además de una inadecuada planeación urbana, por eso, hace falta mayores habitabilidades de los espacios que se ocupan.
Durante la presentación del doctorado en Hábitat y Sustentabilidad, reveló que la sociedad está en desamparo ante ejecuciones hipotecarias, por adeudos y plazos extendidos de los mismos.
Ante este escenario, proponen nuevos enfoques con agenda transversal e inclusiva, para que pueda vincularse al desarrollo social, además de ser capaces de construir perspectivas distintas y esperanzadoras.
Valverde Díaz de León, reveló que, ante los efectos de la planeación vertical, hace falta una retroalimentación y tomar el pulso de lo que pasa en municipios y localidades.
Lamentó que haya una dificultad en la metodología y la forma en que se desarrollan en cascada los planes de desarrollo urbano, que quedan como radiografía del estado actual en el que se presentan los diagnósticos, pero no se cumplen.