“Los comerciantes estandarizan los precios y no distinguen entre turistas y pobladores”, aseguró la profesora de la Universidad Tecnológica de Puebla (UTP), Luz del Carmen Morán Bravo.

La docente, que formó parte del libro “Impacto del programa Pueblos Mágicos en México, Puebla y otras entidades”, realizado por investigadores de 10 instituciones de educación superior del Estado de Puebla revela las conclusiones lo siguiente:

"En los pueblos mágicos del país, el alto costo de los servicios no puede recudir el número de visitantes, existe una pérdida del poder adquisitivo de las comunidades, además de que se encarece la vida".

Dentro de la investigación, realizada en tiempos de pandemia Covid, la académica dijo que buscaron conocer el impacto económico y social, que tiene desde el punto de vista de cada uno de estos actores. 

“Hay una gran distancia desde la percepción de la autoridad y una persona que vive en el pueblo mágico”.

En entrevista para Intolerancia Diario, explicó que se realizó un trabajo en red  con cuatro instrumentos diferentes: centrados en la percepción de la calidad en el servicio, las políticas públicas de financiamiento y operación del programa y de los ciudadanos, sus beneficios y desaciertos.

“Dentro de los resultados con el programa de pueblos mágicos encontramos que se crean empleos temporales, que en su mayoría carecen de prestaciones sociales y de seguridad social”.

Morán Bravo, agregó que como son temporales, dependen mucho de los visitantes, que dejan economía en los pueblos mágicos, pero también se incrementan los precios, porque no todos son visitantes.

“Se incrementan los precios de la canasta básica, porque se estandariza y dan a precios mayores tanto como para pobladores como para turistas”.

La investigadora de la UTP aseveró que dentro de las conclusiones del libro encuentran que, eso le pega a la economía, por lo que añadió, las autoridades locales deberían regular.

"Las comunidades que habitan en los pueblos mágicos necesitan de manera urgente, una capacitación integral, que les permita apropiarse de su espacio".

Por lo anterior, la académica de la UTP afirmó que es urgente atender el tema, pues la marca Pueblos Mágicos tiene un gran posicionamiento a nivel nacional e internacional porque se encuentran turistas extranjeros, la marca y el sello, tienen un impacto a nivel mundial.

Otra cosa que concluyen es que las personas no se encuentran preparadas para dar el servicio con calidad a los visitantes, “la gente no sabe cómo atender a las personas, tienen muy buenas intenciones, pero necesitan ser capacitados para dar esa atención y que los mismos turistas recomienden los pueblos mágicos o el pueblo que visitan”.

Dijo, la calidad en el servicio no puede darse como un estándar, sino que es un tipo de calidad acorde al turismo rural y comunitario.

Una de las oportunidades para las instituciones y las universidades que participan, es que hay un punto en el que tienen que participar dando capacitación en los servicios de turismo, de alimentación, en el servicio de hospedaje, de transporte y de recorridos turísticos.

La investigación se llevó a cabo en los pueblos mágicos de Comala, de Jerez, de Pinos, de Chignahuapan, de Cholula, de Huauchinngo, de Tlatlauquitepec, de Huautla de Jiménez y de Valladolid, con apoyo y financiamiento del Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Puebla (CONCYTEP).