En el país y particularmente en el Estado de Puebla, existe un aumento del fervor católico gracias a la pandemia, sin embargo, todavía no se puede calcular un porcentaje, “pero es, verdaderamente notable, eso se observa”.

Para el asesor cultural de la UPAEP, Eduardo Merlo Juárez, la gente, en estos días, acude más a los templos y participa más en los actos de culto de la iglesia católica.

Y aunque para el año 2020, de acuerdo con el último censo que se tiene registrado, en el comparativo entre 2010 y 2020, se redujo la cantidad de católicos, al pasar de 82.7 a 77.7 por ciento del total del país.

El arqueólogo poblano, destacó que, la pandemia dio lugar al incremento en el porcentaje de fieles de la religión católica, porque la gente se asustó, estaba asustada de la cantidad de muertos que generó la crisis de la COVID-19.

Sin embargo, aclaró que, todavía no hay un censo actualizado con información que compruebe lo dicho, sin embargo, aseveró, se percibe el incremento en la fe católica.

Cabe recordar que, el declive de fieles del catolicismo, de acuerdo con el censo 2020 analizado por la revista Nexos, empieza en los años 50, al llegar a 92.6 por ciento en 1980, al 87.9 por ciento en el año 2000, y alcanzar 5 puntos menos para el 2010.

Datos del mismo censo 2020, indican que en el 2020 el porcentaje de católicos alcanza el 77.7 por ciento, eso significa 19 puntos menos desde 1980.

Para el asesor cultural de la UPAEP, la COVID-19 es, verdaderamente, una peste, es una epidemia que conmovió a todo el mundo y que, al no encontrar, de pronto, los remedios seguros, buscaron los remedios espirituales.

Por eso, reveló que, como siempre ha pasado, no solo en la religión católica, sino en todas las religiones del mundo, los creyentes son cada vez más, “es creciente el fervor católico y se recuperaron muchos fieles que se habían perdido”.

“Sigue siendo un momento de hiper reflexión, de caminar juntos con un motivo espiritual”.

Merlo Juárez, dijo que, la gente debe ver todo este tipo de manifestaciones, que las siga y las acompañe, como turistas o habitantes de la ciudad, o desde los balcones, pero que las siga.

Aseguró que, con el aumento de la gente que participa en la procesión de viernes santo, en el apoyo a la organización, en la participación en cada uno de los templos de donde salen las imágenes y la creación de cofradías, “porque empezamos esta procesión con gente de buena voluntad que las quiso acompañar”.

Recordó que, la primera cofradía fue la de San José, las del Nazareno, muy bien organizada, pero las demás no lo estaban, pero ya se están conformando como cofradías, como hermandades bien constituidas, eso habla de que, la crisis movió mucha gente a buscar remedio espiritual a lo que difícilmente encontrarían con el remedio médico.