Un total de 21 trabajadores de la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros (UTIM) agotarán todos los recursos necesarios para ser reinstalados en sus puestos de trabajo, tras el despido injustificado que tuvieron el pasado 2 de mayo. Lo anterior, luego de que Javier Santiago Reyes, rector de la universidad hiciera público que los despidos de docentes son por causas específicas que violentan los reglamentos de trabajo, por lo que, no requerirán los servicios de seis profesores de asignatura "B" que no cuentan con título de licenciatura y cédula profesional.
Además, seis profesores asignatura "B" por baja matrícula en la universidad, duplicidad de funciones e irregularidades en el proceso de contratación y de dos técnicos de apoyo por duplicidad de funciones con profesores y administrativos, así como por irregularidades en el proceso de contratación.
José Raymundo Ceja Vázquez, profesor inconforme, refirió que buscaron acercamiento con las autoridades estatales para entregar la solicitud de los docentes, personal y técnicos que fueron despedidos tras 21 años de labores.
Refirió que el único argumento que les ha dado las autoridades universitarias es que no cuentan con los recursos necesarios y por control interno les entregaron sus renuncias correspondientes, por lo que estarán buscando apoyo de las instancias federales y estatales para resolver el tema.
“Trabajadores y trabajadoras de la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros que hemos sido despedidos, queremos hacer público que la mayoría de los docentes, son egresados de la universidad y han trabajado por 20 años o más, por lo que se busca que sean recontratados”.
Por esta razón, piden la intervención del gobernador, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, así como de las secretarías de Educación (SEP) estatal y federal, debido a los cambios sin aviso que ha tenido el rector desde su llegada el pasado 15 de marzo.
En rueda de prensa, acusó al rector de que a dos meses de su llegada no conoce los estatutos y ni los proyectos, ni líneas de investigación a seguir de la comunidad estudiantil, debido a que no ha sido presentado de manera oficial.
Compartió que durante los primeros días de mayo fueron notificados por el área de Recursos Humanos de la universidad para argumentarles que su contrato había terminado por “control interno y de suficiencia presupuestal”.
“Nosotros investigamos y el techo presupuestal para la universidad para el ejercicio 2023 es de 71 millones 688 mil 237 pesos sin contar las aportaciones, participaciones, subsidios y apoyos que otorgan los gobiernos federal y municipal”.
Cabe destacar que el rector Santiago Reyes, mediante un comunicado refiere que los trabajadores fueron despedidos de acuerdos la Ley Federal del Trabajo, el Decreto de Creación de la Universidad Tecnológica de Izúcar de Matamoros, el Reglamento Interior, el Reglamento de Condiciones Generales de Trabajo, el Contrato Colectivo de Trabajo con el Sindicato Titular y el Reglamento de Ingreso, Promoción y Permanencia del Personal Académico, se tomó la decisión de no usar más sus servicios.
El texto refiere “De acuerdo con las necesidades de la institución y la suficiencia presupuestal, la Universidad podrá requerir nuevamente de sus servicios, siempre con apego a las normas, disposiciones legales y reglamentarias de los planes y programas académicos vigentes, así como de la disponibilidad presupuestal aprobada por los gobiernos Federal y Estatal, con base en la matrícula alcanzada en el periodo escolar correspondiente”.