Aunque no es posible decir que para la elección presidencial del 2024 no hay nada para nadie, lo cierto es que el partido en el poder, Morena, no la va a llevar en bandeja de plata. A decir de la politóloga de la UPAEP, Claudia Ramón Pérez, es indiscutible que por el número de gobernadores que tiene Morena lleva la ventaja para ganar, sin embargo, “en el análisis de los números no es que vaya a ganar en bandeja de plata”.
Rumbo al proceso electoral federal, dijo, “ni todo está ganado, ni todo está perdido”, porque lo primero es que, de acuerdo con las encuestas pudo ser una derrota aplastante para la oposición, pero no ha sido así, porque en total, en los dos Estados, hubo una diferencia de 1.5 por ciento.
Por eso, ante el recuento de las votaciones del Estado de México y Coahuila, la diferencia es interesante y no llega al escenario que se había supuesto, “el análisis de la participación no fue la esperada, porque metiéndole a los programas sociales podrían sacar a la gente a votar y vimos la disputa de los programas federales y los locales".
Sin embargo, a pesar de ello no logran sacar a la gente a votar, sobre todo los que reciben los apoyos federales y estatales, “es interesante porque Morena usaba estos programas”.
Dijo, otro elemento interesante es que fueron elecciones sin violencia, en paz y esto permite tener elecciones en las que la sociedad y los grupos políticos, maduren, “otra de las cosas es que las autoridades electorales funcionan”.
Por eso, dijo, estas elecciones demuestran que las reglas están vigentes y que dan resultados claros, lo que descarta el discurso de que las autoridades electorales no sirven de gran cosa.
Otro elemento, destacó Ramón Pérez, fue el uso de la urna electrónica que se convierte en un mecanismo que buscan que los ciudadanos podamos acceder de la mejor manera, sin tantos problemas y manifestar la voluntad y la participación.
Algo importante es la forma en que se dan las elecciones, por un lado, el Estado de México con grandes alianzas que concentraron por la importancia que tiene esa entidad federativa.
Incluso, mencionó, se visualizó la presencia de dos grupos, el grupo Texcoco y del grupo Atlacomulco, por eso, era difícil que ambos sacaran las manos del proceso electoral.
“Un punto importante que la división dentro del PRI particularmente de perfiles que no ponen empeño, como Alejandro Moreno y Alejandra del Moral, que no pudieron sacar adelante la elección”.
Las diferencias dentro del grupo hacen que se reflejen en los resultados, señaló la politóloga de la UPAEP, y, por otro lado, algo semejante pasa con Morena y sus aliados en Coahuila.
“Cuando se dan estas elecciones se pierden votos, lo que muestra el análisis hacia el interior de las alianzas y de los partidos políticos, cuando los partidos no cerraron filas es más fácil que pierdan la elección”.