Aunque el peso electoral del PRI es importante en la actualidad, en términos simbólicos ese partido y su presidente Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, poco le ayudarán a una figura como Xóchitl Gálvez dentro de la política nacional.
A decir de Roberto Alonso Muñoz, analista político de la Ibero Puebla, entre los propios priistas existe un rechazo a la dirigencia nacional de Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas.
Prueba de ello, son el grupo de senadores y otros militantes del partido tricolor, que renunciaron al partido político, motivados por el papel de la dirigencia nacional que ha perdido todas las elecciones del país en que ha competido, a excepción de Coahuila.
Y es que, reveló, Alejandro Moreno Cárdenas tiene un saldo tan negativo que, en otro momento político de cualquier otro partido político, ya lo hubiese tenido en la lona o retirado de la dirigencia nacional o estar próximo a hacerlo.
Y es que, es quien siendo dirigente nacional, el que más gubernaturas ha perdido y lo que ha perdido lo ha hecho en tiempo récord y siga el frente del partido que como se ha visto en diferentes entidades, con la excepción a la regla de Coahuila, es un partido que resta y que no suma.
Para la senadora de la república del PAN aspirante a ser candidata a la presidencia, muy poco ayuda el emblema del PRI, además que no forma parte de la clase política nacional, que se mantiene dentro de la ambivalencia.
“Así que hay que entender la decisión que tomaron los senadores como Claudia Ruiz Massieu, Miguel Àngel Osorio Chong, Erubiel Ávila, en el sentido de abandonar un partido que hoy en día que tiene un porcentaje importante de preferencias electorales”.
Por eso, no hay que dejar de ver el 17 por ciento de la decisión de personas en capacidad de participar en una jornada electoral nacional, es un partido que ha entrado en una deriva y un proceso de desgaste sistemático y continuo y que pon en aprietos a la alianza del Frente Amplio por México.
Esos senadores y otros grupos dentro del partido, dijo Roberto Alonso, deciden de manera estratégica mantenerse como independientes en tanto quede aclarada cual va a ser la contienda por la presidencia de la república y tal vez entonces puedan tomar la decisión de cerrar filas hacia algún lado.
Sin embargo, aclaró, no parece que vayan a cerrar filas con Morena, “eso no lo estoy viendo”, al menos no de los senadores priista que renunciaron al partido hace unos días.
Desde el análisis de la salida de priistas que, son principalmente senadores y senadoras, pero también una larga lista de funcionarios que no tienen acceso a un lugar como ese, pero no hay que perder de vista por esta posibilidad de suponer coqueteos con Morena y una eventual desestabilización de ese partido.