La desbandada de diputados locales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) tiene que ver en la forma en que se negocian las candidaturas al interior del partido, pero sobre todo por la falta de diálogo del presidente estatal, Néstor Camarillo, porque ya se observaban inconformidades y ahora es más palpable.

A decir de Claudia Ramón Pérez, politóloga de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), la ruptura tiene que ver con la forma en que se ha desempeñado la dirigencia del instituto político en el estado de Puebla, porque si es un liderazgo firme no estaría la desbandada.

Desde su perspectiva, esa situación pone en un escenario delicado al PRI, que se queda sin fracción parlamentaria y al mismo tiempo lo debilita.

Y es que, hace unos días, los diputados locales del Congreso del Estado de Puebla anunciaron su salida de la bancada del PRI y 5 legisladores anunciaron su salida del instituto político.

La académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Gobierno dijo que la crisis se acentúa con el regreso de algunos personajes que se habían ido a la 4T y que retornan en busca de cargos públicos.

El problema, señaló, es que esto empieza a afectar el ánimo de la militancia, porque al final de cuentas lo hacen en busca de espacios porque disminuyeron las oportunidades dentro de la 4T y eso hace que retornen al tricolor.

Sin embargo, señaló, eso implica negociaciones y menos espacios, sobre todo por la forma en que va la negociación con la alianza partidista que contenderá en el proceso electoral del 2 de junio.

Por eso, la analista política dijo que llama la atención la forma en que juegan en el discurso, porque anuncian que no se van a otro partido político y sí formar un grupo plural dentro del Congreso del Estado de Puebla.

Ese escenario, dijo, puede ser una señal de que están a la espera de que puedan resolverse al interior o migrar hacia otro lado, hacia otro partido político, pero eso no ha sucedido.

Ramón Pérez señaló que la postura del dirigente ha sido tajante y eso es un tema de que no hay diálogo y hay un problema de decidir quienes deben estar en las listas de las candidaturas, “lo que vemos es que hoy, la política hoy se traduce en pragmatismo”.

La politóloga de la UPAEP dijo que esto es terrible porque se deja de lado a la militancia, a los electores que han confiado en el partido a lo largo de los años.

Claudia Ramón aseguró que a la militancia que habían tenido, solo buscaba lo más conveniente para su propio partido, que no es que se oponga a la alianza, aunque se oponen a otro tipo de cuestiones y se quedan como independientes.

“Por eso la inconformidad, aunque se trata de proyectos, de políticas públicas o de mantener a un grupo en el poder, ese es un problema porque se dejan de lado las identidades”.