Tras lamentar la ola de crímenes que no dejan en paz ni a México, ni a Puebla en la pandemia por coronavirus, el arzobispo, Víctor Sánchez Espinosa, pidió por el descanso eterno del agente investigador de la FGE, José Emeterio Ortega Parra, quien fue asesinado en un operativo en San Matías Tlalancaleca el pasado 6 de abril.

En ese sentido, reiteró el llamado a los feligreses a defender a la vida en cualquiera etapa del ser humano desde la concepción hasta la muerte natural.

Víctor Sánchez Espinosa llamó a mantener las medidas sanitarias para evitar contagios de Covid-19 al recordar que el virus aún permanece en el mundo. Lamentó que en Puebla, al igual que en diferentes entidades del país, los ciudadanos y autoridades comienzan a relajar las medidas de higiene.

Durante la celebración del Domingo de Ramos en Catedral, refrendó que conservar la salud en medio de estos tiempos violentos, es una de las bases para preservar la vida.

“Dios nos da la vida y Dios nos quita la vida, por eso reprobamos toda violencia, por eso reprobamos toda criminalidad; la vida es sagrada y tenemos que cuidar la vida y la salud de nuestras familias”.

Subrayó que este es el momento idóneo para la reconciliación entre todos los seres humanos en medio de las adversidades como las guerras absurdas para que regrese la paz y tranquilidad a la comunidad global.

Pidió eliminar toda muestra de traición entre los ciudadanos; además, recordó que este domingo, San Lucas presenta a Jesucristo como ejemplo de reconciliación, al insistir que desde la cruz ofrece el perdón a los victimarios.

No seguir a falsos mesías

Durante su intervención, el arzobispo de Puebla pidió a los feligreses no seguir a falsos mesías en el mundo terrenal, al destacar que estos ofrecen diferentes alternativas, pero lo único que quieren es aumentar su egolatría en medio de adulaciones.

“Hay ciertas multitudes manipuladas o interesadas que con gritos claman a falsos mesías, a gente terrenal, hinchados de poder temporal, que en su egolatría se embriagan con las adulaciones servilistas de sus incondicionales; nosotros al único mesías, el que nos amó".

Está época, recapituló, es para que las personas comiencen un cambio interior con el objetivo de que se conviertan en mejores seres humanos.

“Que la Semana Santa, tomando en cuenta el triduo sacro, viernes santo, sábado santo y domingo de resurrección; sea más que un espacio de vacaciones, a veces no tan sano, mucho menos santo, para que sea el espacio propicio para interiorizar y vivir intensamente los misterios de la muerte y resurrección del Señor en los que se sustenta nuestra fe".

En ese marco pidió a los cristianos a que, si salen de vacaciones o van con algún familiar, no dejen de participar en las actividades religiosas como la misa crismal, la misa de la instauración de la eucaristía y los actos religiosos que recuerdan la crucifixión y resurrección de Jesús. 

“Esto es una semana santa, hay que vivirla santamente, si salimos de descanso, si vamos a visitar a la familia, allá busquemos participar en las celebraciones propias de la semana santa, que son celebraciones de los sagrados misterios de fe, los más importantes del año litúrgico"

"Estas son las grandes fiestas de Cristo y de su iglesia, si vamos de vacaciones, allá donde vamos de vacaciones, busquemos participar de las celebraciones de la semana santa”, finalizó.