Para los amantes del buen cine, una de las opciones indiscutibles es el servicio streaming de MUBI, el cual contiene un amplio catálogo de películas, así como la mejor curaduría de producciones cinematográficas de todos los tiempos. Además, la colección de su catálogo, siempre está en constante rotación.  

En este mes de marzo grandes opciones llegan a la plataforma entre estos largometrajes, cortos, documentales y mucho más. Películas de todas las épocas, autores, festivales, nacionales e internacionales, por temática, por artistas entre otras muchas opciones.  

De su catálogo 

Glass Life del 2021, con la dirección de Sara Cwynar, este corto se sumerge en una avalancha de pantallas hechas para el consumo y la vigilancia. Al plasmar la compulsión con la que navegamos por las imágenes, la artista canadiense sale del bucle infinito del hipervínculo con una visión fascinante de la belleza estética en nuestros días. 

Ocho sentencias de muerte, de 1949. Con la dirección de Robet Hamer, los  Ealing Studies ofrecieron en su momento comedias británicas imperecederas. En este caso, la trama lleva a una historia negra con política subversiva y los valores cien por ciento amorales. Se destaca que Alec Guinness hace en esta producción 8 personajes distintos.  

La vida de Calabacín del 2016, con la dirección de Claude Barras, ofrece una dramática comedia animada en stop motion franco suiza.

La cinta nominada a Mejor Película animada en los premios Oscar edición 89, habla de Ícaro un niño solitario de 8 años que vive en un pequeño departamento con su madre, la cual es alcohólica y le dice como sobrenombre "Calabacín".

Un accidente hace que la madre muera y Calabacín tiene que ir un orfanato, este lugar le cambiará la vida de la mejor manera. 

Escrita líricamente por Céline Sciamma, es una película única, que ofrece sabiduría irrefutable para todas las edades y condiciones sociales, donde sus jóvenes personajes muestran una notable resistencia y humor frente a lo que la vida les depara. 

Taxi Teherán del 2015, es el tercer trabajo realizado por el director Jafar Panahi, luego de que le prohibieran hacer cine, Panahi elude a las autoridades iraníes en este ingenioso viaje por las calles de Teherán, hablando con sus habitantes, quienes, a su vez, le confían secretos a su conductor. Ganadora del Oso de Oro en la 65ª Berlinale. 

Madres e Hijas del 2009, tiene la dirección de Rodrigo García. La cinta explora las alegrías y las penas de la paternidad moderna con una sensibilidad conmovedora de múltiples niveles, cuenta con las actuaciones de Annette Bening, Samuel L. Jackson y Naomi Watts entre otros. 

Los insólitos peces gato del 2013. Con la dirección de Claudia Sainte-Luce, la trama enfatiza el valor de la familia elegida, una captura al creciente vínculo entre una joven solitaria y una ruidosa familia monoparental. Filmado por Agnès Godard, frecuente colaboradora de Claire Denis, el gentil drama se deleita con la calidez de encuentros improbables. 

Ran de 1985, con la dirección de Akira Kurosawa, la cinta es majestuosa épica que readapta a Shakespeare para crear una maravillosa y espectacular saga feudal con imágenes y sonidos inolvidables. 

El Miau del Gato del 2001. En su penúltima película como director, Peter Bogdanovich toma la espuria historia de un escándalo y construye un divertimento total.

Kirsten Dunst es parte del exquisito elenco que bebe alcohol ilegal, se deleita con comentarios de doble sentido y baila Charleston en la glamurosa era del cine mudo.

Una del 2016, marca el El debut de Benedict Andrews basado en la obra ganadora del Tony Blackbird, de David Harrower, profundiza en la reverberación del trauma cuando una joven confronta a su abusador. Con la gélida y perfecta actuación de Rooney Mara, también cuenta con los geniales Ben Mendelsohn & Riz Ahmed. 

Rompiendo las olas de 1996, la cinta de Lars von Trier, tiene en su reparto a Emily Watson nominada al Oscar por su actuación en la película de Lars von Trier y ganadora del Gran Premio del Jurado en Cannes.

La trama es una mezcla incendiaria de erotismo y fervor religioso que evoca al gran Carl Dreyer, un melodrama sobre el amor, la fe y la redención espiritual.