Warner Bros Discovery anunció este lunes su decisión de dividirse en dos compañías independientes, una enfocada en sus negocios tradicionales de televisión por cable y otra en sus crecientes plataformas de streaming, en un intento por adaptarse a los profundos cambios en el consumo de medios.
De acuerdo con la información revelada, el conglomerado reorganizará su portafolio para crear una empresa centrada en canales como CNN, TNT, TBS y Discovery, mientras que otra entidad se enfocará en las plataformas Max y Discovery+, además de su división de estudios cinematográficos, que incluye Warner Bros Pictures.
La medida busca dar mayor agilidad operativa a ambas divisiones y facilitar su crecimiento en mercados con dinámicas muy distintas. Mientras la televisión por cable ha visto una caída sostenida en suscriptores, el negocio de streaming continúa siendo el principal motor de crecimiento, pese a la intensa competencia con gigantes como Netflix, Disney+ y Amazon Prime Video.
Fuentes cercanas a la empresa señalan que el CEO David Zaslav permanecerá al frente de la unidad de cable en el corto plazo, mientras se evalúan nuevos liderazgos para cada compañía.
La separación aún debe recibir la aprobación de los reguladores y se espera que se concrete a lo largo de 2025. Según analistas, esta escisión podría facilitar futuras alianzas estratégicas o incluso la venta de algunas divisiones.
Con esta decisión, Warner Bros Discovery se suma a una tendencia creciente en la industria mediática, en la que grandes conglomerados buscan redefinir su estructura para responder a los retos de la era digital.
