El crecimiento urbano de la ciudad de Puebla obliga a la creación de un sistema de transporte moderno como: tren ligero o monorriel, que además de abatir los costos en mantenimiento, disminuir el aforo vehicular y garantizar una reducción de emisiones contaminantes, permita consolidar a la capital como una urbe en un marco internacional.

Así lo aseguró el director de Desarrollo de Negocios para Latinoamerica de Bombardier, Juan Manuel González Lelo de Larrea, al formar parte del cierre de campaña del aspirante a la presidencia de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) Delegación Puebla, Ricardo Pérez Güemez.

Al fungir como invitado especial, el empresario afirmó que los modelos de transporte: tren ligero y monorriel, resultan idóneos para la ciudad de Puebla, debido a su diseño urbano y crecimiento económico, considerando los casi 6 millones de habitantes de la capital.

Precisó que tan sólo el sistema monorriel requiere de una inversión de al menos 20 millones de dólares por kilómetro, mientras que un sistema ferroviario como el tren ligero se podría desarrollar con 40 millones de dólares.

Consideró que el plan estratégico de dicho proyecto debe rebasar las expectativas del primer cuadro de la ciudad, esto para abatir la demanda urbana en transporte público.

De bajo costo
Asimismo, González Lelo de Larrea resaltó el bajo costo que estos sistemas de transporte generan, comparado con los autobuses de uso urbano actual, ya que mientras un tren ligero mueve a 8 mil pasajeros cada tres minutos, este mismo volumen de pasajeros requiere de seis autobuses tradicionales.

Descartó que exista un acercamiento con el gobierno electo que representa Rafael Moreno Valle, para gestionar un proyecto de gran magnitud en materia de transporte, aunque urgió en la necesidad de que este plan forme parte de las acciones del nuevo gobierno, debido a la actual saturación que muestra el sistema de transporte urbano.

Explicó que sistemas como el transporte ligero requieren de años para la elaboración de una evaluación, impacto social y económico, además de un esquema de proyección a largo plazo.

En este sentido, estimó que en un plazo no mayor a doce meses podría diseñarse el estudio, y en un periodo de 18 a 24 meses considerar el primer sistema de funcionamiento.

De avalar tal proyecto en la siguiente administración, el empresario consideró viable la licitación, en lugar de gestionar la obra vía concesión o a través de Proyectos Públicos Privados (PPS), aunque estableció que el gobierno debe asumir al 100 por ciento la inversión y posteriormente licitar una concesión de la operación, como actualmente se realiza en las carreteras de cuota en autopista.

Resaltó que este tipo de modelos en transporte ya han sido aplicados de forma efectiva en ciudades de España, Bélgica y Estados Unidos.

El llamado
En el marco de su cierre de campaña, el aspirante a ocupar la dirigencia en la CMIC ‚Äîpor la planilla Enlace‚Äî Ricardo Pérez Güémez, hizo un llamado a los constructores para recuperar el protagonismo de la Cámara y consolidar la democracia, transparencia y honestidad en el organismo empresarial.
Al reunir a más de 100 líderes en el sector de la construcción, arquitectura e ingeniería, el representante de la planilla Enlace exhortó a los presentes a consolidar la figura que años atrás posicionó al organismo como líder en el sector de la construcción.

Los presentes
‚Ä¢    María del Carmen Zepeda Hernández, presidenta del Colegio de Arquitectos de Puebla
‚Ä¢    Armando Ortiz,presidente del Club de Industriales y Empresarios de la Industria de la Construcción
‚Ä¢    Daniel Ortiz Caso, delegado de la SCT federal,
‚Ä¢    Sebastián Serrano Vega, presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Puebla
‚Ä¢     Armando Adame Sosa, vicepresidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE),