La hotelería organizada enfrenta la competencia desleal de servicios informales de hospedaje, que no pagan impuestos ni ofrecen garantías a sus clientes, y en algunas plazas superan en número a los hoteles regulares.

En entrevista Armando Uribe Valle, presidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles, señaló que los casos más graves son Acapulco, con dos habitaciones irregulares por cada una de las formales, y San Miguel de Allende, con una relación uno a uno.

Por ello, anunció que este martes la directiva de la asociación a su cargo se reunirá con autoridades de las secretarías de Hacienda y Turismo, para entregar información detallada sobre el caso y resolverlo.

Aunque en ocasiones anteriores ya se han entregado legajos completos con información detallada de los sitios que ofrecen hospedaje sin pagar impuestos, hasta el momento las autoridades no han “metido en cintura” a esos lugares.

En el caso de San Miguel de Allende hay dos mil 500 habitaciones de hotel, con una ocupación promedio de 38 por ciento al año, pero se calcula que hay un número similar de sitios de hospedaje que se anuncian en Internet sin ninguna regulación.

Uribe Valle aclaró que los hoteleros no solicitarán impedir a dueños de casas o departamentos que los ofrezcan en renta a los turistas, sino obligarlos a competir en las mismas condiciones.

Esto es que paguen los servicios de teléfono, luz y agua a precios comerciales y no domésticos que son hasta 50 por ciento más baratos y garanticen capacitación, seguridad y respaldo comercial a sus clientes.

Y es que, advirtió, mientras los hoteles deben hacer cuantiosas inversiones en mantenimiento, capacitación, contratación de personal y pago de servicios, las casas y departamentos particulares se ahorran esos costos y por lo tanto compiten de manera desleal.