El alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, no estuvo en la inauguración de la rehabilitación del mercado El Alto, que fue encabezada por el gobernador, Miguel Barbosa Huerta, luego de que el segundo lo señaló por actos anticipados de campaña a principios de esta semana.

“Vengo solo. No vengo con el presidente municipal, respeto mucho al presidente municipal, pero creo que las cosas deben ser así, por separadito, con mucho respeto”, justificó el mandatario poblano.

El evento ocurrió días después de la visita a Puebla del líder nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, quien pidió al edil capitalino recorrer los municipios del estado, para apuntalar sus aspiraciones políticas rumbo a 2024.

Horas después, el gobernador anunció que ya no estaría en eventos públicos con el munícipe -a menos que sean de Estado-, pues el panista podría realizar actos anticipados de campaña.

En diciembre de 2021, Barbosa Huerta y Rivera Pérez estuvieron juntos en el arranque de los trabajos del mercado. Todavía el 22 de agosto, el gobierno de la ciudad informó sobre el avance de las obras, en las que este miércoles no tuvo presencia.

Durante la inauguración, la autoridad fue clara sobre el origen de los recursos para el proyecto: más de 20 millones de pesos que salieron solamente del erario estatal.

Colores partidistas

Durante su discurso, Miguel Barbosa Huerta recordó a los locatarios de El Alto que el mercado es suyo, y que no deben aceptar órdenes para pintarlo del color de ningún partido político.

“Píntenlo del color que quieran, que nadie les venga a sugerir que sea guinda de Morena, menos azul del PAN, píntenlo del color que quieran, del color del pozole, del mole de panza, de lo que quieran, es de ustedes. No dejen que la politiquería los contamine”.

Expresó que su gobierno nunca ha puesto condiciones para la realización de obra, y que la gente puede darse cuenta de ello.

“Yo nunca he puesto ninguna condición, porque la gente se convence de un trabajo cuando se ve un trabajo honesto”.

También les recordó que su administración terminará el 13 de diciembre de 2024, y que deben exigirle respeto al nuevo gobernador o gobernadora.

“Quedan pendientes, los vamos a ir cumpliendo para no esperar que alguien les ponga condiciones a cambio de que pinten sus espacios de algunos colores políticos”, concluyó.