Los cuerpos sin vida de dos hombres, de los que por el momento se desconoce su identidad y la causa de su muerte, fueron hallados —el primero— en la calle Mirador entre Tlaxcala y Maravillas de la población de Santa María Coronango, y el segundo en la esquina de la 109 Oriente y la 18 Sur, cerca de la colonia Los Gavilanes, la mañana y tarde del lunes 17 de febrero. Ambos estaban envueltos en bolsas de color negro.

La Procuraduría General de Justicia (PGJ) no ha proporcionado información de las investigaciones que inició tras el hallazgo de los dos cuerpos, sin embargo trascendió que alguno de ellos podría ser de un exelemento de la Policía Ministerial (PME) —Juan Ramírez Romero—, que desde el sábado se encuentra reportado como desaparecido.

Fue la esposa del exagente desaparecido quien presentó la denuncia por desaparición de persona, reportando que su marido salió la tarde del sábado a bordo de un taxi y ya no regresó ni se comunicó, y como esto no era usual se preocupó.

El primero de los cuerpos fue hallado la mañana del lunes por vecinos que lo reportaron al 066, presentándose elementos de la Policía Municipal de Coronango, que acordonaron la zona en espera de la llegada del agente del Ministerio Público de San Pedro Cholula para que iniciaran las investigaciones correspondientes.

El cuerpo del desconocido vestía ropas de color obscuro, se encontraba envuelto en dos bolsas tipo costal de basura; la primera colocada de la cabeza a la cintura y la segunda, de las piernas a la cintura, ambos amarrados con cinta adherible transparente.´

El cuerpo fue trasladado al anfiteatro del panteón municipal de San Pedro Cholula, para que el médico legista se hiciera cargo de la práctica de la necropsia para conocer las causas de su muerte.

Segundo embolsado 
Vecinos de la colonia Gavilanes, de la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacánm reportaron que en un camino de terracería, a la altura de la calle San Marcos esquina con la 109 Oriente, fue hallado el cuerpo de un sujeto que estaba dentro de bolsas de plástico de color negro, de la misma forma que fue hallado el primero.

Se dijo que se trataba de un hombre, luego de que por una de las hendiduras se apreciaba una playera de rayas, misma que presentaba manchas de sangre.

La agente del Ministerio Público de Homicidios Mónica García Gutiérrez se presentó al lugar para iniciar las primeras investigaciones, girando instrucciones para que el cuerpo fuera trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), para que el médico legista se haga cargo de la práctica de la necropsia.