Luego de la muerte de cuatro poblanos que intentaban cruzar hacia Estados Unidos por el río Bravo, en Camargo, Tamaulipas, la Comisión de Migración y Asuntos Internacionales del Congreso local estableció contacto con las autoridades de aquella entidad y también con las del estado de Puebla, para solicitar información detallada y ofrecer auxilio, desde el ámbito legislativo, en el caso de estos paisanos originarios del municipio de Chignahuapan.
La diputada Maritza Marín Marcelo, presidenta de ese órgano de la LIX Legislatura, en coordinación con Arturo Lira, del Centro de la Comunidad Mexicana (Cecomex), señalaron que las autoridades de Protección Civil del municipio de Camargo informaron del lamentable ahogamiento de cuatro paisanos, quienes viajaban en una cámara de hule que utilizaron como balsa en su intento por llegar a Estados Unidos en esa frontera del estado de Tamaulipas.
La improvisada embarcación, en la que navegan sobre el río Bravo en total seis personas, sufrió una ponchadura por la perforación de la rama de un árbol.
Por este incidente, murieron ahogados Hipólito Fidel Hernández Maldonado, de 25 años, y Agustín Gaspar Ordóñez, de 26 años, originario de la comunidad de Potrerillos, Chignahuapan, Puebla; así como los hermanos Gustavo Aguilar Tapia, de 18 años, y Servando Aguilar Hernández, de 23 años, originarios de la comunidad de Acoculco, del mismo municipio.
De los poblanos que intentaban alcanzar el sueño americano y que cruzaban por segunda ocasión en menos de 15 días, sobrevivió José Gaspar Guevara, de 25 años, y una persona más, cuyo nombre no ha sido dado a conocer, quien presuntamente servía de guía.
Los cinco poblanos —de acuerdo con la información recabada— salieron de Chignahuapan el pasado lunes 19 de septiembre y el incidente en que perdieron la vida cuatro de ellos se registró este lunes 29 por la noche.
Se trataba de su segundo cruce, ya que en el primero habían sido aprehendidos por las autoridades migratorias estadounidenses y confinados en el centro de detención de Brownsville, Texas, para luego ser deportados por la frontera tamaulipeca.
