El 22 de septiembre de 2015, a las 19 horas, dos agentes de la Policía Federal Ministerial fueron emboscados‎ cuando circulaban a bordo de una camioneta oficial en el kilómetro 9 más 500 de la carretera federal vía Xalapa-Acatzingo, resultando heridos por disparos de rifles de asalto.

Los agentes Juvencio Espinoza Juárez, de 33 años de edad y Álvaro Luna Robles, investigaban el robo en ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) ‎cuando fueron sorprendidos por un comando armado.

Tras la agresión, los dos agentes heridos fueron auxiliados por la Policía Municipal de Acatzingo, quienes con el apoyo de paramédicos los trasladaron al Hospital El Ángel para que fueran atendidos.

Aquel día acudieron elementos de la Policía Federal, de la Ministerial Federal, del Estado y Municipal, además del Ejército y el Ministerio Público de la Federación, pero no pudieron hallar a los agresores.

La presencia de la "cosa nostra"

Acatzingo se ubica a 50 kilómetros de Puebla, entre La Malinche y el Citlaltépetl, se encuentra dentro del distrito judicial de Tepeaca y es uno de los cuatro municipios con mayor violencia por la presencia del crimen organizado, en estos se encuentran: Palmar de Bravo, con su junta auxiliar de Palmarito Tochapa; Quecholac y Tecamachalco.

Este municipio es proclive al ‎robo de hidrocarburos porque por sus subterráneos pasa el ducto de Pemex que va de Minatitlán, Veracruz y que en territorio poblano llega hasta San Martín Texmelucan.

Organizaciones criminales de Veracruz, Hidalgo, además de mafias del centro y norte del país, centraron sus principales negocios en el robo de hidrocarburos y se acentuaron en toda la franja donde pasa el ducto de Pemex, interesándoles la gasolina y el diesel.

Acatzingo fue uno de los lugares donde asentaron fuerzas, donde contrataron "mano de obra barata" para que se hicieran cargo del robo de hidrocarburos, además de que para el traslado utilizaron vehículos, principalmente camionetas, robados en Puebla, Veracruz, Hidalgo, Estado de México y la Ciudad de México.

Datos duros de una guerra desigual

Con el escaso armamento con que cuenta la Policía Municipal de Acatzingo para hacer frente a este tipo de delincuencia organizada, en 2013 detuvieron a 22 personas por robo de hidrocarburos, además de que aseguraron 111 vehículos, la mayoría camionetas pick-up, de 3 toneladas, de estas 40 con reporte de robo, asegurando 200 mil litros del combustible.

De 2005 a la fecha, de acuerdo con reportes de Seguridad Pública de Acatzingo, se han registrado cinco muertes violentas entre bandas de chupaductos, además de la muerte de un elemento de la Policía Municipal, utilizándose en estos hechos de violencia armas de asalto como R-15 y Cuerno de Chivo.

Más violencia

El 2 de noviembre de 2015 a la una de la madrugada, en bulevar Poniente del fraccionamiento El Trébol, ocurrió otra balacera, un grupo de hombres armados dispararon contra el ocupante de una camioneta Ford.

La unidad quedó con al menos 30 impactos de arma de fuego, el conductor, Lucio Hernández, con antecedentes penales de robo de hidrocarburo, recibió cuatro impactos de arma de fuego. 

Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal y paramédicos de SUMA que trasladaron al herido al Hospital Ángeles, ubicado en ese mismo municipio.

Agresiones contra policías 

El 7 de noviembre de 2015 a las 15 horas, en la junta auxiliar de San Nicolás Bravo la Policía Municipal de Acatzingo detectó a unos 20 sujetos que estaban armados y que estaban vendiendo combustible.

Los municipales solicitaron el apoyo de la Policía del Estado e ingresaron al lugar para detener a los sospechosos, sin embargo, los pobladores se le fueron encima a los uniformados, les agredieron con piedras y botellas con la finalidad de proteger la huida de los sospechosos.

Los hombres armados dispararon contra la policía y al ser repelida la agresión, dos de estos resultaron heridos, uno en la pierna y otro en un tobillo, mientras que los demás lograron escapar.

Durante la refriega, un elemento de la Municipal en moto -Isaías García--‎ fue atropellado a propósito por una de las camionetas que escapaba, incluso se bajaron para golpear al uniformado y después huir.

El herido fue trasladado a un hospital de Puebla, presentaba traumatismo cráneo encefálico, además de fracturas en las costillas.

De los presuntos chupaductos heridos sus nombres son: Ignacio González Alejo, de 26 años y Ángel de los mismos apellidos, de 23, su papá se llama Nazario González Tepetzi y tiene antecedentes penales por robo de hidrocarburos y portación de arma de fuego.

Policía auxiliar ejecutado

El 22 de enero de 2016 a las 22:40 horas la comandancia del Acatzingo recibió una llamada del Arco de Seguridad de Palmar de Bravo, donde les reportaron que en la calle 5 de Mayo, entre Insurgentes y Pino Suarez, de la junta auxiliar de Actipan de Morelos, se había registrado una agresión armada y había una persona herida.

Al llegar los uniformados encontraron la unidad P-011, de la Policía Auxiliar de ese lugar y en una de las laterales se encontraba el cuerpo sin vida del policía Andrés Alberto Juárez Díaz, de 32 años de edad, quien ya había muerto.

El uniformado presentaba 10 impactos de arma de fuego en todo el cuerpo, de los calibres R-15 y .45. 

Su compañero de vigilancia se encontraba en dicho lugar, dijo que cuando estaban estacionados llegaron sujetos armados que iban a bordo de una camioneta Ford de color negro, quienes los obligaron a bajarse y a los dos los hincaron.

Solo a uno ejecutaron y después se dieron a la fuga.

Se presume que al policía lo asesinaron porque horas antes habían participado, en Actipan, en el aseguramiento de dos camionetas que transportaban hidrocarburo robado.