Los padres de Adriana Coate Rojas de 16 años de edad, la cuarta víctima mortal de la agresión armada ocurrida en los campos deportivos de Acatzingo ‎el domingo pasado podrían presentar cargos por negligencia en contra del hospital San Ángel.

La ‎tarde del jueves falleció Adriana, quien presentaba dos heridas de arma de fuego calibre Ak-47, en la pierna y parte baja derecha del cuerpo, de acuerdo con reportes que se encuentran radicados en la Averiguación Previa 1829/2016/TEPEACA.

A las 17:15 horas el representante social y elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), acudieron al nosocomio, ubicado en privada 4 Poniente, número 39, de Acatzingo, para tomar conocimiento del cuarto fallecimiento de víctimas de la agresión armada por parte de dos integrantes de un grupo de sicarios, que iban a bordo de dos camionetas.

Los padres de la joven adelantaron al Ministerio Público que iban a proceder contra el nosocomio, porque consideraron que la atención no fue la adecuada.

El parte del médico legista indicó que la joven murió por shock escéptico y coagulación intravascular.

El domingo 12 de junio, durante la tarde, hombres armados ingresaron al campo de béisbol de Acatzingo, cuando se celebraba un partido final.

Los sujetos ubicaron y dispararon contra ‎José Luis Vélez Robles, de 37 años de edad, presunto líder roba ductos de la zona de Candelaria Portezuelo, del municipio de Felipe Ángeles, a quien asesinaron, lo mismo que a Diego Mauricio Hernández Rojas, además de que dejaron al menos 15 heridos.

De las otras dos víctimas; Abel Luna Blas, quien era recolector de tunas y la menor Adriana Coate Rojas, quienes presenciaban el partido cuando ocurrió la agresión.

Hasta el momento la Fiscalía General de Estado (FGE), no ha reportado el avance de las investigaciones.