Los operarios de una planta nuclear en la prefectura de Fukushima tienen programado abrir la válvula del contenedor de un reactor para reducir la creciente presión, lo que podría derivar en la liberación de vapor radiactivo.
El ministro japonés de Industria, Benri Kaieda, dijo que el posible nivel de radiación liberada del reactor en la Planta Número 1 de la compañía Tokyo Electric Power en Fukushima, afectada por el terremoto de la víspera, será muy bajo y que la seguridad de la población está asegurada.
Mientras tanto, el director de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Yukiya Amano, dijo en Viena que el organismo está preparado para prestar ayuda si Japón lo solicita.
"La AIEA está lista para proporcionar ayuda técnica de cualquier clase, si Japón lo requiere", dijo Amano en una declaración.
La agencia destacó que las autoridades japonesas ordenaron el desalojo de unos tres mil residentes que viven en un radio de tres kilómetros en torno a la planta, y recomendado a quienes viven en un radio de 10 kilómetros que permanezcan en el interior de sus casas.