La fuerte vinculación económica con Estados Unidos y que dos de los bancos más importantes en México, por nivel de activos, tengan su casa matriz en España podrían representar un riesgo en el panorama actual, consideró Bank of America/Merrill Lynch.
De ahí, refiere en el análisis “México y su armadura contra la volatilidad financiera”, las autoridades deberían de centrarse en dichos riesgos.
Expone que los fuertes vínculos con Estados Unidos en un frágil entorno económico muestran la necesidad de diversificar el intercambio comercial de México y promover nuevas fuentes de crecimiento doméstico.
De materializarse una recesión en el vecino país del norte, señala, la producción mexicana probablemente le seguiría, aunque el equipo de economistas de este banco de inversión proyecta 40 por ciento de probabilidad de que se presenta una recesión en Estados Unidos en los próximos 12 meses.
Además, si se considera que los dos principales bancos en México, por tamaño de activos, son subsidiarias de bancos españoles, un empeoramiento de la crisis de la deuda europea podría llevar a una salida sustancial de capital.
De acuerdo con cifras recientes de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, los bancos en México con casa matriz en España y que se ubican en el segundo y tercer lugar del ranking por su nivel de activos son BBVA Bancomer y Santander.
A decir de Bank of America/Merrill Lynch, aún cuando las autoridades han avanzado en limitar los préstamos bancarios a las matrices extranjeras, el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero (CESF) debe mantenerse vigilante de estos bancos.
Detalla que los flujos de portafolio han sido considerablemente altos, en especial en activos de renta fija, mientras que la posesión de Cetes por parte de extranjeros ha crecido sustancialmente a 30.3 por ciento en agosto, de 8.7 por ciento el año pasado.
En tanto, la posesión de MBonos incrementó a 40 por ciento, de 26.2 por ciento en el mismo periodo. Por tanto, señala, los participantes de mercado podrían encontrar difícil el llenar esta brecha en caso de una reasignación severa de portafolios.
La institución financiera advierte además un riesgo a la baja para su proyección del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México, aunque espera que la actividad económica continuará creciendo por encima del potencial.
No obstante, destaca, con las reservas internacionales a niveles históricos y la línea crediticia contingente con el Fondo Monetario Internacional (FMI), México tiene todavía armamento para enfrentarse a choques externos.