La economía de Estados Unidos se mantiene en una “severa depresión” y culminará el 2011 con un déficit presupuestal de 1.38 billones (millones de millones) de dólares, el tercero más alto en los últimos 65 años.

La Oficina Presupuestal del Congreso (CBO), brazo no partidista de investigación del Congreso, vaticinó este viernes en un reporte que la economía estadunidense crecerá apenas 2.3 por ciento en 2011 y 2.7 por ciento en 2012, conforme la crisis financiera.

La institución indicó que la reciente recesión siguen ensombreciendo el horizonte económico del país.

“Aún cuando la producción económica empezó a expandirse nuevamente hace dos años, el ritmo de la recuperación ha sido lento, y la economía continúa en una severa depresión”, señaló.

Su proyección ocurre en momentos que los mercados aguardan con anticipación un discurso que pronunciará el viernes el presidente de la Reserva Federal Ben Bernanke en la reunión del banco central en Jackson Hole, en el estado Wyoming.

El año pasado Bernanke utilizó la cita económica para sentar las bases de la masiva compra de bonos por 600 mil millones de dólares a fin de reactivar la economía y existe expectativa de posible anuncios en momentos que la economía estadunidense registra una nueva desaceleración.

En su proyección, la CBO estimó que la economía estadunidense continuará su recuperación, pero alertó que la crecimiento real del producto interno bruto seguirá por debajo de su potencial durante varios años.

“Bajo las leyes actuales, las políticas fiscales y de gastos impondrán limitantes sustanciales sobre la economía en 2013, por lo que la CBO proyecta que el crecimiento se desacelerará ese año antes de repuntar a 3.6 por ciento de 2013 a 2016”, añadió.

El presidente Barack Obama tiene previsto anunciar la primera semana de septiembre un nuevo plan de creación de empleos y reactivación económica, que incluirá iniciativa de infraestructura y reformas impositivas, aunque su desenlace es incierto en el Congreso.

Un “súper comité” de 12 legisladores debe identificar nuevos recortes de gasto por 1.5 millones de millones de dólares para el de noviembre, o de lo contrario se activarán reducciones automáticas en el presupuesto del Pentágono y agencias civiles.