El artista y disidente chino Ai Weiwei ha sido emplazado a pagar 15 millones de yuanes (2.3 millones de dólares) en concepto de impuestos atrasados y multas a la Hacienda china. Ai considera que se trata de una medida arbitraria que tiene por objetivo hacerle callar.

Este activista de 54 años y uno de los intelectuales chinos más conocidos internacionalmente ha recibido esta mañana una notificación de las autoridades fiscales avisándole que tiene dos semanas para hacer efectiva su deuda.

"Si no pago pueden meterme en la cárcel, eventualmente por un periodo de hasta siete años", ha señalado a diversos medios de comunicación.

La compañía es de su esposa, Lu Qing, que es la representante legal de la firma. Ai Weiwei, que trabaja en ella como diseñador, ha señalado no haber recibido ninguna prueba de evasión fiscal y que no cree que la empresa haya evadido impuestos.

Este artista, que estuvo detenido sin cargos durante 81 días entre abril y junio pasados, ha declarado que "si se trata de un problema de impuestos pagaré. Pero si no es así, no voy a pagar", ha dicho Ai, que considera que "todo este asunto es ridículo".

Ai Weiwei fue detenido el pasado 3 de abril en el aeropuerto de Pekín cuando se disponía a viajar al extranjero. Su detención, realizada en una época de fuerte represión del Gobierno contra los disidentes y los activistas pro derechos humanos, provocó una oleada de protestas internacionales.

Fue liberado y puesto bajo vigilancia a finales de junio, tras pagar una fuerte fianza.

El Gobierno anunció en su día que Ai estaba siendo investigado por posible delito económico y le prohibió abandonar Pekín.