Las autoridades nigerianas anunciaron el lunes un segundo caso de ébola en la nación más populosa de África, mientras que la OMS reportó que la cifra de muertos por el virus en diversos países del continente aumentó en 150 a 887.
La mayoría de los nuevos casos se registraron en Liberia, donde las autoridades ordenaron que todas los que mueran de ébola sean cremados después que los pobladores se resistieron a que los cadáveres fueran inhumados en las cercanías. Durante el fin de semana, un grupo de personas trataron de impedir que las autoridades sanitarias enterraran 22 cadáveres en las afueras de la capital, Monrovia.
La Organización Mundial de la Salud anunció el lunes que la cifra de muertos aumento de 729 a 887 en Guinea, Sierra Leona, Liberia y Nigeria.
El ministro de Salud nigeriano Onyebuchi Chukwu dijo que el segundo caso confirmado en su país es un médico que había ayudado a atender a Patrick Sawyer, el hombre liberiano-estadounidense que murió el 25 de julio días después de arribar a Nigeria procedente de Liberia.
Aún se esperan resultados de pruebas realizadas a otras tres personas que también atendieron a Sawyer y no han mostrado síntomas de ébola, agregó. Las autoridades tratan de hallar y poner en cuarentena a otros.