Según informó la Fiscalía general en un comunicado, el yihadista habría contactado con otro tunecino de 26 años de edad que presuntamente conocía “los planes de Anis Amri y le habría ayudado”.
"Existe la sospecha de que el sospechoso conocía los planes del atentado y pudo ayudar a Anis Amri", añadió el organismo, sin dar más detalles.
Los investigadores creen que ambos jóvenes tenían contacto desde finales de 2015 y que lo mantuvieron, “incluso en los días próximos al atentado habrían hablado”.
La policía registró en la capital alemana, Berlín, una vivienda en la que el autor de los hechos vivió con un compañero y que presumiblemente podría haber contactado también días antes del atentado.
Según la Fiscalía, lo importante es recopilar información sobre Amri, tanto antes como después del ataque para aclarar la forma de actuar del autor de la matanza del 19 de diciembre en la capital alemana.
El fiscal general anunció este miércoles que en unas horas se dará una conferencia de prensa en Karlsruhe para dar nuevas informaciones del estado de las investigaciones.
La detención de Anis Amri, autor del atentado en Berlín, no se llevó a cabo en Alemania por falta de pruebas por parte de las autoridades judiciales, a pesar de que era un solicitante de asilo tunecino rechazado y con antecedentes penales, del que las autoridades sabían que podría tener relación con el terrorismo.
El sospechoso, que estuvo vigilado durante seis meses en Alemania, puso en evidencia las deficiencias de la actuación policial y de las agencias de seguridad del país.
En Alemania hay ahora un debate sobre la eficiencia de las autoridades alemanas encargadas de la seguridad porque éstas sabían que Amri podría estar preparando un atentado terrorista.
El ministro del Interior, Thomas de Maiziere, planteó en una colaboración que ayer publicó el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, en la que propuso una reestructuración del sistema de seguridad nacional en Alemania.
De acuerdo con el ministro, la total independencia de los gobiernos estatales y del gobierno federal es muchas veces más un obstáculo que una ayuda para las investigaciones judiciales.
Propuso que las oficinas de investigaciones políticas que hay en los estados, que son las oficinas de Protección a la Constitución, queden bajo el mando único del gobierno federal. La propuesta levantó hasta ahora muchas críticas pero también apoyo.
Las diferentes policías en Alemania funcionan en forma independiente unas de otras, de manera que ni siquiera hay un amplio archivo digital a través del que se puedan conseguir a la brevedad informaciones sobre las investigaciones recabadas sobre algúna persona determinada.