La ex presidenta de Argentina, Cristina Fernández (2007-2015), denunció que enfrenta una "persecución" en su contra en un año electoral en el país sudamericano.

Fernández afirmó lo anterior horas antes del inicio del juicio oral y público en su contra por encabezar presuntamente una asociación ilícita para cometer fraude en la concesión de obras públicas a empresarios cercanos a su familia.

"En unas horas comenzará en (los tribunales federales de) Comodoro Py un juicio oral al que jamás debí haber sido citada", escribió Fernández a través de su cuenta de Twitter.

"Se trata de un nuevo acto de persecución con un único objetivo: colocar a una ex presidenta opositora a este gobierno en el banquillo de los acusados en plena campaña presidencial", señaló. 

La también senadora nacional y precandidata a vicepresidenta en los comicios generales previstos para este año dijo que "igualmente, una vez más y como siempre lo he hecho, volveré a ir. Sí...pese a todo volveré a ir".

"Claramente no se trata de hacer justicia. Sólo armar una nueva cortina de humo que pretende distraer a los argentinos y las argentinas -cada vez con menos éxito- de la dramática situación que vive nuestro país y nuestro pueblo", consideró la ex mandataria.

El juicio contra Féndandez comenzará este martes luego del mediodía y busca determinar si la ex presidenta direccionó durante su gestión obras públicas por valor de 46.000 millones de pesos (1.000 millones de dólares) en favor del Grupo Austral de construcciones, propiedad del empresario Lázaro Báez, detenido desde 2016.

Los fiscales que prepararon el caso en la etapa previa, Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques, afirman que los acusados se asociaron de manera ilegal para favorecer a Báez con la adjudicación de 52 obras públicas en la provincia de Santa Cruz (sur) entre 2004 y 2015.

Con información de Xinhua