Este fin de semana, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, apareció en Corea del Norte y se reunió con el líder de aquel país, Kim Jong-un dando un "paso histórico" entre ambos países.
Los dos mandatarios aparecieron en la Zona Desmilitarizada (DMZ), la cual se encuentra en la franja fronteriza entre las dos Coreas.
A pesar de que este encuentro fue rápido, Donald Trump hizo historia al ser el primer presidente de Estados Unidos que pisa el territorio de Corea del Norte.
Ambos presidentes llegaron a la conclusión de que este tipo de encuentros generan que sucedan "muchas cosas positivas”, pues se está trabajando en un posible proyecto en conjunto entre Washington y Pyongyang.
Donald Trump destacó que la buena relación entre los mandatarios comenzó el 12 de junio del año pasado en Singapur: “Nos hemos caído bien, desde el primer día”.
Por su parte, el líder norcoreano aseguró a los medios asiáticos que estaba “sorprendido” de que Trump apareciera en esta zona.
Expertos en el tema político señalan que estos encuentros han servido para destrabar el proceso de negociaciones, sobre el programa nuclear norcoreano, el cual busca Estados Unidos que se frene de una vez por todas.