La primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, estaría “contando los minutos para el divorcio” después de más de 15 años de “matrimonio transaccional” y de numerosos años de convivencia en habitaciones separadas, según reportan medios como el Daily Mail y exempleadas de la residencia.

“Melania está contando cada minuto hasta que él deje el cargo y ella pueda divorciarse. Si Melania intentara hacer la última humillación y se fuera mientras él está en el cargo, él encontraría la manera de castigarla”, ha afirmado la exasistente de la Casa Blanca, Omarosa Manigault Newman, que trabajó un año al servicio de la familia Trump y al marcharse publicó un escandaloso libro con información de sus días allí y varias cintas de audio.

Stephanie Winston Wolkoff, antigua amiga y asistente de la exmodelo eslovena, afirma que durante las primeras 10 semanas de la presidencia de su marido permaneció en Nueva York y evitó trasladarse a Washington para reescribir el acuerdo prenupcial y garantizar que, en un futuro, su hijo Barron herede la parte justa que le corresponde de la fortuna familiar.

Otra presunta amiga, dijo que Melania jamás esperó que su marido fuera a ganar la presidencia, por lo que la victoria del republicano en las elecciones del 2016 supuso un tremendo mazazo por el que lloró desconsoladamente: “Ella nunca esperó que él ganara”.

Hasta el momento, la primera dama ha estado casada con Trump exactamente los mismos años que su primera esposa Ivana Trump, con la que tuvo sus tres hijos mayores, Donald Trump Jr., Ivanka y Eric. Aunque es sabido que la primera logró una indemnización acorde a la fortuna de magnate en esa época, en el caso de Melania, hasta que no se hiciera oficial su petición de divorcio no estaría claro qué suma de dinero le correspondería.

Aunque con la primera esposa no se firmó un acuerdo de confidencialidad, con Marla Maples, su segunda esposa y madre de su hija Tiffany Trump, el presidente sentó el precedente y negoció antes de su boda en 1993 un contrato que le impedía publicar ningún libro o dar entrevistas críticas con él en caso de divorcio. Ahora, se dice que Melania habría aceptado un código de silencio similar que impediría posibles escándalos futuros en caso de que la separación llegara a producirse finalmente.

Con información de La Vanguardia.