Este viernes, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, llegó a la ciudad de El Paso, Texas, en la frontera con México para evaluar los efectos de la migración irregular de personas procedentes de Honduras, El Salvador y Guatemala.
La vicepresidenta se desplazó a un centro de detención de inmigrantes de la patrulla fronteriza, donde conoció a algunos indocumentados que ahí se encontraban, esto previo a reunirse con activistas abogados y varias ONG.
“Estoy contenta de estar aquí. Siempre fue mi plan venir aquí, y creo que vamos a tener un día bueno y productivo”, dijo Harris.
Las instalaciones que visitó la vicepresidenta son conocidas como Central Processing Center y cuentan con más de 9 mil metros cuadrados en los que se detiene a aquellos indocumentados que acaban de cruzar irregularmente la frontera, antes de ser trasladados a otros centros.
La visita de Harris ocurre tras recibir diversas críticas de la oposición republicana por no haberse desplazado a la zona limítrofe y a pocos días de que el expresidente Donald Trump viaje a la frontera acompañado del gobernador de Texas, Greg Abbott.