El cohete más grande del mundo, Starship, desarrollado por SpaceX para viajes a la Luna y Marte, explotó poco después del despegue, pero este primer vuelo de prueba fue celebrado por el dueño de la empresa, Elon Musk, que prevé un nuevo lanzamiento "en unos meses".
El megacohete negro y plateado despegó con éxito a las 08:33 hora local desde Starbase, la base espacial de SpaceX en Boca Chica, Texas, entre los gritos de alegría de los empleados. Pero poco después explotó.
"¡Felicitaciones al equipo de SpaceX por un emocionante lanzamiento de prueba de Starship! Hemos aprendido mucho para el próximo lanzamiento de prueba en unos meses", tuiteó Musk.
La causa de la explosión aún no se conoce. El propósito de este vuelo de prueba era recopilar la mayor cantidad de datos posible para mejorar los siguientes prototipos.
El lunes se canceló un primer intento de lanzamiento en los últimos minutos de la cuenta regresiva, por un problema técnico.
"Este es el primer vuelo de un cohete enorme y muy complejo", había dicho el domingo Musk, y calificó la prueba como "muy arriesgada".
La agencia espacial estadounidense, NASA, eligió la nave Starship para transportar astronautas a la Luna por primera vez desde que finalizó el programa Apolo en 1972. La misión, conocida como Artemis III, está prevista para fines de 2025.
El jefe de la NASA, Bill Nelson, elogió a SpaceX. "Cada gran logro en la historia ha requerido cierto nivel de riesgo calculado", tuiteó, diciendo que estaba "ansioso" por la próxima prueba.