Las autoridades estadounidenses han recuperado las cajas negras del avión comercial que la noche del miércoles colisionó en el aire con un helicóptero militar sobre el río Potomac, en Washington. El accidente, que dejó un saldo de 67 fallecidos, incluyendo al menos dos víctimas de origen latino, ha encendido alarmas sobre las condiciones de la torre de control del Aeropuerto Internacional Ronald Reagan, donde presuntamente no había personal suficiente para coordinar el tráfico aéreo en el momento del impacto.

Un informe preliminar de la Administración Federal de Aviación (FAA) reveló que el único controlador aéreo en servicio estaba simultáneamente encargado de supervisar los vuelos de helicópteros y de gestionar los despegues y aterrizajes de aviones comerciales, una tarea que normalmente debería realizarse con el apoyo de un segundo controlador.

El siniestro involucró un avión Bombardier CRJ-701 operado por PSA Airlines bajo el vuelo American Airlines 5342 y un helicóptero UH-60 Blackhawk del Ejército de Estados Unidos que realizaba maniobras de entrenamiento en el área. Ambas aeronaves se precipitaron tras el impacto, lo que llevó al cierre temporal del aeropuerto y a una intensa movilización de los equipos de emergencia, que recuperaron restos de los pasajeros y tripulantes en la zona.

Análisis de las cajas negras

La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) confirmó el hallazgo del grabador de voz de la cabina y del registrador de datos de vuelo del avión comercial. Sin embargo, la caja negra del helicóptero aún no ha sido localizada. Los investigadores esperan que el análisis de estos dispositivos permita esclarecer las causas exactas del accidente.

Pete Hegseth, Secretario de Defensa, destacó que la tripulación del Black Hawk tenía amplia experiencia en este tipo de maniobras, por lo que se descartaría una falla humana como causa principal.

Por su parte, el presidente Donald Trump lamentó la tragedia y aseguró que la investigación será exhaustiva, pero también responsabilizó a las administraciones previas de Barack Obama y Joe Biden por lo que considera un deterioro en la seguridad aérea. “Yo pongo la seguridad primero. Obama, Biden y los demócratas pusieron la política en primer lugar”, afirmó en una conferencia de prensa.

Investigación en curso

La NTSB, junto con la FAA y el Pentágono, mantiene abierta la investigación y se espera que en los próximos días se emita un informe preliminar con los primeros hallazgos. Hasta el momento, las autoridades no han divulgado los nombres de las víctimas, pero trabajan en la identificación de los cuerpos recuperados en el sitio del siniestro.