La inflación en Estados Unidos registró un incremento del 0.2 por ciento durante el mes de febrero, situando la tasa anualizada en 2.8 por ciento, según el informe publicado por el Buró de Estadísticas Laborales del Departamento del Trabajo. Este aumento ha intensificado la preocupación sobre el futuro económico del país, en medio de una creciente guerra comercial impulsada por el presidente Donald Trump.
El reporte también reveló que, al excluir los precios de alimentos y energéticos, el índice de Precios al Consumidor (CPI) se ubicó en 3.1 por ciento anualizado. La escalada inflacionaria refuerza la incertidumbre económica en un contexto de tensiones comerciales con Canadá, México y otras naciones, derivadas de las políticas proteccionistas implementadas por la administración Trump.
El informe se dio a conocer en el mismo momento en que entró en vigor un arancel del 25 por ciento sobre las importaciones de acero y aluminio, afectando especialmente a Canadá, Brasil, México, Corea del Sur y Vietnam. Estas naciones, principales exportadoras de productos metalúrgicos a EE.UU., podrían responder con medidas arancelarias en represalia, lo que podría agravar la situación económica estadounidense.
Entre los principales factores que impulsaron la inflación en febrero, el informe destaca el incremento del 0.3 por ciento en el costo de la vivienda, que representó casi el 50 por ciento de la subida anual de la inflación. En contraste, los precios de los servicios aéreos y la gasolina experimentaron caídas del 4 por ciento y 1, respectivamente.
Además, los precios de los alimentos también subieron un 0.2 por ciento en febrero, mientras que en el acumulado de 12 meses reflejaron un aumento del 3.1 por ciento. Esto afecta directamente a los consumidores y podría tener consecuencias en el poder adquisitivo de los hogares estadounidenses.
Desde que Trump asumió la presidencia por segunda ocasión el pasado 20 de enero, la inflación ha mantenido una tendencia al alza, lo que ha contribuido a una pérdida del 8 por ciento en el mercado bursátil de Wall Street. Analistas económicos advierten que existe un 40 por ciento de probabilidades de que la economía estadounidense entre en recesión en los próximos meses.
El 18 y 19 de marzo, los gobernadores del Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal se reunirán para evaluar la situación macroeconómica del país, analizando la inflación, el desempleo y las proyecciones de crecimiento. Mientras tanto, la incertidumbre económica persiste, y las políticas comerciales de Trump continúan generando preocupaciones sobre la estabilidad financiera de Estados Unidos.
