Dos astronautas de la NASA, Suni Williams y Butch Wilmore, regresaron a la Tierra después de una inesperada estadía de nueve meses en la Estación Espacial Internacional (EEI).
Su misión, originalmente planeada para durar solo ocho días, se prolongó debido a problemas técnicos con la nave Starliner de Boeing.
La tripulación amerizó con éxito en la costa de Florida a bordo de la nave Freedom de SpaceX, tras un viaje de 17 horas desde la EEI.
La cápsula descendió con ayuda de cuatro paracaídas antes de tocar el agua en el golfo de México.
Fueron recibidos con júbilo y trasladados en helicóptero a Houston para iniciar su rehabilitación.
Williams y Wilmore, ambos ex pilotos navales y veteranos de misiones espaciales, fueron parte de una misión histórica que despertó el interés global.
Su prolongada estadía los colocó entre los astronautas con misiones más largas en la historia de la NASA, destacando los desafíos físicos y técnicos de las misiones espaciales extendidas.