El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este jueves que aceptó la invitación de su homólogo chino, Xi Jinping, para visitar China junto con la primera dama Melania Trump y el canciller alemán, Friedrich Merz, en un intento por aliviar las tensiones entre ambas potencias.

A través de su cuenta en Truth Social, Trump informó que durante una llamada telefónica con Xi discutieron asuntos comerciales y acordaron el viaje. “Como presidentes de dos grandes naciones, esto es algo que ambos esperamos con entusiasmo”, escribió.

El mandatario estadounidense señaló que la conversación se centró en temas estratégicos, entre ellos los imanes de tierras raras, insumos clave en la producción tecnológica y militar. Sin embargo, no especificó si China se comprometió a acelerar las licencias de exportación de estos materiales, una de las principales exigencias de Washington.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China emitió un comunicado en el que afirmó que Beijing ha cumplido con lo pactado en la tregua arancelaria alcanzada en Ginebra el mes pasado, a pesar de que funcionarios estadounidenses han expresado su inconformidad con el ritmo de los cambios.

Trump reconoció que la relación comercial “se había desviado un poco”, pero aseguró que actualmente “estamos en muy buena forma con China y el acuerdo comercial”.

En un giro inesperado, el presidente también aseguró que los estudiantes chinos son bienvenidos en Estados Unidos, a pesar de las recientes restricciones impuestas por su administración. “Vienen estudiantes chinos. No hay problema. Es un honor para nosotros recibirlos”, declaró ante periodistas en la Oficina Oval.