En tres años, la Secretaría de Seguridad pública dio de baja a 180 elementos por reprobar los exámenes de control de confianza que se aplicaron en la corporación.

De hecho, los elementos fueron cesados por presentar documentación apócrifa, estar relacionados con actos de corrupción, asociación delictuosa y por abusos de autoridad.

De todos los despedidos, al menos 80 fueron por no ser aptos para permanecer en la corporación y el resto por extorsiones en agravio de ciudadanos o por ser cómplices de grupos de delincuentes que participaron en delitos.

Lo anterior, fue confirmado por el secretario de Seguridad Pública del Municipio, Amadeo Lara Terrón quien aseguró que lejos de dar desconfianza a los ciudadanos se demuestra que no hay segundas oportunidades para nadie.

En entrevista, el funcionario municipal aseveró que todos los casos en están involucrados elementos cometiendo algún ilícito se han seguido de manera oportuna hasta aplicar la suspensión de sus cargos.

Lara Terrón destacó que si bien parece que el despedir a 180 elementos de la corporación en lo que va de la actual administración es una muestra de desconfianza, para él es una muestra de que se está actuando en consecuencia.

“Nosotros hemos dado cuenta que estamos tenido un actuar congruente y responsables al dar de baja a elementos que no son aptos para la corporación o que han cometido algunos ilícitos”.

El encargado de la seguridad pública en la entidad aseveró que todos los uniformados que se han visto involucrados en delitos han sido sancionados como lo establece la ley, caso contrario que en anteriores gestiones simplemente se protegían para no causar baja de la dependencia.

“Nosotros hemos sancionado a elementos involucrados en acciones ilícitas, cosa que nadie anteriormente había hecho, por lo que hemos sido muy claros de establecer la ética como una forma de vida de los elementos, tal y como lo dijo el presidente municipal, no hay segundas oportunidades”.

El funcionario municipal aseguró que en el caso de elementos que han sido involucrados con delincuentes, han sido separados de sus cargos y también puestos a disposición de las autoridades ministeriales para proceder en su contra.

Además, indicó que todos los uniformados son notificados después de terminar el proceso de evaluación de control de confianza por lo que se solicita su separación del servicio para garantizar que Puebla tenga una policía confiable.

El encargado de la seguridad en la capital aseveró que todo el personal que no resultó aprobatorio en los filtros de la corporación, fueron dados de baja por no cumplir con el perfil para prestar un servicio de seguridad a favor de los poblanos.

 “Lo que queremos es que Puebla sea ejemplo a nivel nacional en el manejo, capacitación y evaluación de sus policías para garantizar mejores resultados a los ciudadanos con elementos que cumplan el perfil y las características que se requieren para este servicio”.

El secretario de Seguridad Pública reiteró que las bajas tienen que ver con oficiales de diferentes áreas de responsabilidad en el ámbito operativo tanto de policía como de tránsito municipal.