Hasta 10 millones de pesos podría costar la reparación de la calle donde aparecieron dos socavones hace unos días en el municipio de San Andrés Cholula.

Dicho monto alteró el presupuesto que el gobierno municipal tenía destinado para obras de mantenimiento, señaló en entrevista a medios locales, el presidente municipal, Edmundo Tlatehui Percino.

El edil indicó que la actual administración no tenía contemplado el gasto extraordinario, por lo que aún se desconoce qué trabajos pueden poner en marcha.

Adelantó que ya se han realizado diversos estudios en la calle Atzala, donde ocurrió el percance, la que ha presentado diversos problemas de movilidad.

Uno de los problemas está en el drenaje y ante el aumento del agua que pasa por el colector pluvial, se revisa con la Secretaría de Infraestructura.

La remodelación de la vialidad no solo será de los tramos en donde aparecieron los hoyos, sino de toda la vialidad.

“La administración no tenía calculado ese daño, sin embargo, estaremos dando seguimiento para garantizar la seguridad a los ciudadanos que habitan en la calle y que se vieron afectados por estos socavones”, dijo el munícipe.

En dicha arteria vial de la cabecera municipal, hace unos días se registró un socavón, por lo que se busca evitar mayores afectaciones y en su caso generar el proyecto de atención para garantizar la seguridad de las y los ciudadanos, resaltó el munícipe.

Dicho socavón tiene unas dimensiones de unos 6 metros de ancho con aproximadamente 2 metros y medio de profundidad, y en la evaluación realizada esta mañana se indicó que se dio debido a la mala condición del colector pluvial que cursa por esta vialidad.

La calle Atzala, quedó habilitado a un solo carril, de poniente a oriente, para el tránsito únicamente de los vecinos de la zona y de fraccionamientos aledaños.

Además, se habilitaron rutas alternas para la ciudadanía en general, en la esquina de la calle 22 Norte y calle La Mesa, donde habrá unidades de Tránsito permanentes.

La Dirección de Protección Civil realizó el acordonamiento necesario desde que se formó el hundimiento para seguridad de transeúntes y automovilistas. Dicho abanderamiento permanecerá mientras se llevan a cabo los estudios correspondientes del suelo para su reparación.