Al menos trescientas personas entre obreros y empleados administrativos de la Fábrica de Calzado Sandak, ubicada en el municipio de Calpulalpan se quedaron sin trabajo, tras de que los dueños mandaron a cerrar las pertas, sin que les notificaran.
Este lunes las y los obreros llegaron a la fábrica de zapatos para iniciar su jornada laboral a las siete de la mañana, pero se encontraron las puertas cerradas con cadenas y candados.
Ante esta situación, no pudieron ingresar a su fuente de empleo y tampoco encontraron a ningún representante de la empresa, elementos de seguridad dejaron vacía la caseta de vigilancia y se plantaron frente a la fábrica.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores de Calzado Sandak, Gustavo Labastida Andriano, informó que hace una semana los empresarios extrajeron siete series de moldes e intentaron sustraer la maquinaria de la planta.
Ante esta situación los obreros se organizaron para montar guardias frente a la empresa y de esa forma impedir el hecho.
Había 20 obreros haciendo guardia en el campamento, cuando los dos elementos de seguridad de la empresa colocaron los candados al filo de las tres de la mañana del lunes.
Tardaron en darse cuenta que los empleados de seguridad privada tras cerrar las puertas se dirigieron a la parte trasera de la planta. Luego saltaron la cerca perimetral y ya entrada la mañana, se plantaron al otro extremo de la carretera federal.
Explicó que aun cuando habían extraído las siete series de moldes, los obreros seguían trabajando, pero con el cierre de la empresa quedaron sin empleo 250 personas.
Agregó que en tanto no encuentren solución al problema laboral, pedirán ayuda a la sociedad mediante boteo, ya que "son 250 familias que quedaron sin sustento, por ello pedimos apoyo y comprensión a la ciudadanía, pues queremos seguir con nuestra fuente de empleo".