En entrevista, el presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Alejandro Luna Ramos, dijo que los magistrados del órgano jurisdiccional tienen la Constitución y una serie de ordenamientos para dar legalidad y valor al voto de cada uno de los ciudadanos.
En el marco de la inauguración del coloquio Cádiz y la Modernidad Política Mexicana, el magistrado se refirió a las elecciones del pasado domingo en Michoacán, y al respecto indicó que “yo siempre he señalado que los procesos electorales son nones, no tienen paralelo".
Por ello, dijo, las acusaciones que se hicieron de que gente armada intimidó a la ciudadanía para que no votara, es una situación que presuntamente se dio, pero no es un referente de que ello se presente a nivel nacional.
De ahí que reiteró “lo que yo puedo garantizar es que hay un Tribunal Electoral que va a contar cabalmente sus votos, que va darle valor a la votación y legalizar la votación que se emita, y esa garantía la tiene cada uno de los ciudadanos, lo demás corresponde a otras autoridades”.
Sobre si el TEPJF atraerá el caso de las elecciones de Michoacán, comentó que “debemos de respetar la autonomía de todas las autoridades. Creo que se deben seguir los cauces legales y en caso que haya una inconformidad, resolverla atendiendo la petición de los quejosos”.
Por separado, el magistrado Flavio Galván Rivera dijo que es peligroso que se diga o no que se intimidó el electorado en Michoacán, y que este será el reflejo de lo que se vivirá en 2012, ya que se trata de un hecho que está sujeto a prueba.
En ese sentido, subrayó, si alguno de los partidos o coaliciones invocara esta circunstancia, tendrá que aportar las pruebas para acreditar que es verdad o tendrán las otras partes el derecho de probar que no es cierto.
De ahí que “esperaremos primero al cómputo estatal en el caso de gobernador y los municipales y distritales, y estaremos a lo que resulta de lo que señale el Instituto Electoral de Michoacán a través de los consejos competentes”.
Sin embargo, reconoció que debe tener cuidado con acusaciones de este tipo, pues es un argumento que se ha dado en Tamaulipas, Durango, Oaxaca y Guerrero, y “espero que no sea problema ni la coacción del voto o la inducción al voto”, ya que sería terrible.
Confió en que haya la suficiente madurez en los políticos, en los partidos, autoridades electorales y ciudadanos, para que “podamos tener en 2012 elecciones no sólo libres y auténticas, sino sobre todo en paz, porque eso es lo que les dará libertad y autenticidad”.