El director del Centro Nacional de Prevención de Desastres, Roberto Quaas Weppen, advirtió que se mantiene el incremento en la actividad del Popocatétpetl, lo que no significa emergencia inmediata, pero sí la necesidad de estar alerta.
En conferencia de prensa informó que se ha formado un domo de unos 100 metros al interior del cráter del Popocatépetl con alrededor de un millón de metros cúbicos de material.
Desde 1994 a la fecha se han formado y destruido 37 domos y hoy no se descarta la salida de material por bocas laterales e incluso actividades explosivas.
Al explicar lo que ocurre en el volcán, señaló que es imposible prever cuándo se puede producir una erupción, pero las condiciones actuales hablan de un incremento en la actividad.
Planteó que no se descarta caída de ceniza y de material incandescente aunque, en los parámetros actuales, parece que no sería tan grave como los eventos de 1994.
Recordó que en ese año se calculaba en 19 millones de metros cúbicos el material acumulado y ahora se calcula en apenas un millón de metros cúbicos.
Ante ello, la coordinadora general de Protección Civil del gobierno federal, Laura Gurza, afirmó que hoy, en las condiciones actuales, no debe bajarse la guardia y hay que estar muy atentos a la actividad del volcán. Sobre todo mantener la restricción de los 12 kilómetros.
Aunque indicó que de momento no parece haber peligro para poblaciones cercanas, de todas formas se mantiene la recomendación de evitar acercarse al cráter y estar atentos de todos los avisos de las autoridades locales y federales.
Recomendó vigilar los cuerpos de agua en las poblaciones cercanas al volcán, para evitar que la caída de cenizas pudiera contaminarlos, pues es necesario cuidar la salud de la gente.
Al respecto, Ana Lucía Gil, directora general de Protección Civil, sostuvo que la mañana de este miércoles, se llevó a cabo una reunión entre autoridades involucradas en el Plan Popocatépetl, para revisar el estado de los planes.
Estuvieron autoridades de Protección Civil de Puebla, Morelos, Estado de México, Tlaxcala y el Distrito Federal, además de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y otras autoridades federales.
Anunció que la Secretaría de Salud distribuirá 40 mil cubrebocas entre poblaciones cercanas para prevenir afectaciones por caída de ceniza.
Además, informó que se revisaron las rutas de desalojo y la capacidad de vehículos de autotransporte para el eventual desalojo de la gente e incluso entidades como Tlaxcala o el Distrito Federal, que no tendrían poblaciones afectadas, pondrían albergues a disposición de los afectados, si se requiere.
Puntualizó que algunos estados tienen tan analizado el terreno, que incluso se marcan los topes que existen y el tiempo que llevaría quitarlos para agilizar el desalojo.