El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) detectó la presencia del virus de influenza aviar H7N3 en 10 granjas en Jalisco y se han registrado hasta ahora un millón 700 mil aves afectadas.

Indicó que como resultado del brote de influenza aviar H7N3 en los municipios Acatic y Tepatitlán, Jalisco, se activó el Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal en la región Los Altos.

Comentó que se han revisado 111 granjas avícolas y 15 predios de traspatio, lo que confirmó la presencia del virus exótico en 10 granjas, las cuales están en cuarentena y aisladas.

El organismo resaltó que también se mantienen, en acuerdo con la industria avícola nacional y regional, las medidas de control de la movilización, a fin de evitar que aves afectadas, carne de ave, despojos y gallinaza contaminadas se trasladen a otras regiones.

En un comunicado, explicó que hasta el momento se han levantado cuatro mil 209 muestras en la región donde surgió el brote, las cuales son analizadas en los laboratorios Regional de Diagnóstico para Enfermedades Emergentes y Móvil de Salud Animal del Senasica.

El dispositivo sanitario aplicado en las granjas y traspatios abarca seis millones 120 mil 500 aves, de las cuales han sido afectadas por el virus un millón 700 mil.

El número de aves que han muerto por enfermedad o despoblado como medida de control y erradicación son 870 mil hasta el día de hoy, preciso el organismo.

El servicio reiteró que el virus de influenza H7N3 no representa un riesgo para el consumo de productos avícolas, al tiempo que explicó que las medidas de control y erradicación aplicadas tienen como propósito proteger la producción de esta zona.

Actualmente, operan siete puntos de verificación internos en la zona y 38 expertos en sanidad animal trabajan en diagnóstico, prevención, control y erradicación del virus, y se tiene el respaldo de los técnicos de los centros Nacional de Servicios de Diagnóstico de Salud Animal y Nacional de Servicios de Constatación en Salud Animal.

De manera paralela científicos mexicanos realizan pruebas, una vez identificado el virus, para elaborar una vacuna con el apoyo de los laboratorios ubicados en el territorio nacional.