Personas encapuchadas dañaron este sábado instalaciones del Palacio de Gobierno de Guerrero en Chilpancingo, e incendiaron camionetas de empresas nacionales y transnacionales, una patrulla de la Policía Federal, así como al menos 20 vehículos particulares que estaban en el estacionamiento.
Raúl Milliani Sabido, titular de la Subsecretaría de Protección Civil estatal, confirmó que son nueve las camionetas incendiadas.
Los encapuchados usaron los vehículos de las empresas, y una patrulla de la Policía Federal –con el número 15-732- para destrozar algunos accesos del portón del Palacio de Gobierno, en específico la parte trasera del edifico Acapulco.
El Palacio de Gobierno está integrado por siete edificios, de los cuales, según confirmó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Chilpancingo, el más dañado es el edificio Acapulco por la quiebra de sus ventanales, ya que las personas encapuchadas lanzaron piedras al edificio.
El alcalde de Chilpancingo, Mario Moreno, mencionó a la cadena Milenio TV que "muchachos de Ayotzinapa" ya se están retirando hacia su escuela, en referencia a manifestantes normalistas, aunque las personas estaban encapuchadas.
El alcalde dijo que no podía asegurar que entre los manifestantes que participaron en estos hechos estuvieran profesores de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG).
De hecho la CETEG se deslindó de los hechos vandálicos de la tarde del sábado en el Palacio de Gobierno.
Su vocero, Miguel Ángel Varón Benancio, precisó que en el ataque a ese edificio público no participaron docentes del magisterio disidente, aunque no deslindó a normalistas de Ayotzinapa de poder haber actuado en esos hechos.
"No vamos avalar ni acciones de vandalismo, hemos sido muy incisivos que por esa vía por lo menos los maestros no nos responsabilizamos de lo que hagan otros, esto no", dijo.
Las personas encapuchadas lanzaron bombas molotov al interior de las camionetas de empresas, las cuales se incendiaron estando ya en los accesos del Palacio de Gobierno.
La protesta inició aproximadamente a las 17:00 horas (local) con una marcha, pero fue a las 05:41 horas (local) que comenzaron a vandalizar el edificio público.
Es la segunda ocasión en que resulta dañado desde la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, ocurrida el 26 de septiembre.
El edificio Acapulco, el más afectado, es en donde están las oficinas de la Secretaría de Finanzas y de Seguridad Pública Estatal.
Fueron al menos 30 manifestantes encapuchados los que quitaron a 15 efectivos de la Policía Federal la patrulla con el número 15-732 para ser lanzada a las rejas del Palacio de Gobierno e incendiarla.
Aproximadamente a las 18:00 horas arribaron efectivos de la Dirección de Bomberos Municipal para combatir el fuego.
Las personas encapuchadas arribaron a esa zona del municipio de Chilpancingo a bordo de al menos 10 autobuses de pasajeros y 10 camionetas particulares.
El gobernador interino de Guerrrero, Rogelio Ortega Martínez, afirmó que no permitirá que los violentos perjudiquen al estado, aunque no responderán con grupos antimotines o efectivos policiacos ante esos hechos.
"Que no se crea que Guerrero es un polvorín y que no pueden venir a disfrutar de Acapulco", dijo el gobernador.
En conferencia de prensa en el puerto de Acapulco, Ortega dijo que los "violentos" se han aprovechado del dolor de los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa, esto en relación a la quema de vehículos afuera del Palacio.
Pidió a los profesores de la CETEG y al Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan que se deslinden de los hechos violentos registrados durante las últimas semanas en el estado, y los convocó a que se sumen a una mesa de diálogo. Foto: Xinhua