En el marco de la entrega del Premio Nacional de Derechos Humanos 2017, otorgado a Miguel Álvarez Gándara, el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, expresó que es vital el trabajo de los ciudadanos, “porque sólo a través del esfuerzo conjunto entre sociedad y gobierno es posible construir un país de libertad, dignidad e igualdad de derechos", por lo que  pidió a la Cámara de Senadores ampliar los espacios de diálogo y concretar acercamientos con organizaciones de la sociedad civil para resolver el dictamen sobre la Ley de Seguridad Interior.

En los últimos años, el país ha tenido avances importantes en el primero de estos elementos, el diseño de nuestro sistema jurídico, empezando con la reforma constitucional de 2011, que amplió el reconocimiento y la protección de los derechos humanos", dijo durante su discurso.

Agregó que otros esfuerzos en la actual administración para garantizar el respeto a los derechos humanos son los esfuerzos legislativos para impulsar la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; la Ley General de Víctimas; la Ley General sobre Tortura y la Ley General en Materia de Desaparición.

En el evento también estuvo presente el ombudsman Raúl González Pérez, quien reiteró que la seguridad en el país no se logrará con una Ley como la que ahora se debate en el Senado.

Los mexicanos no debemos resignarnos a vivir con miedo, pero tampoco a la incertidumbre. Tengamos la prudencia y mesura para seguir el camino amplio de una discusión integral, cuyo fin sea dotar a la población de seguridad y respeto a sus derechos humanos”, agregó González Pérez.

Al respecto, Miguel Álvarez Gándara indicó que “en el deplorable caso de que la Ley de Seguridad Interior fuera promulgada, animo a la Comisión Nacional de Derechos Humanos para que se apegue al artículo 105 constitucional y ejercite ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la acción de inconstitucionalidad que abra el camino para su invalidez”.