En su primer día de gestión, Joe Biden canceló el programa conocido como Protocolos de Protección al Migrante, con el que los migrantes solicitantes de asilo en Estados Unidos debían esperar en México hasta la resolución de su situación en tribunales locales.
El programa entró en vigor en marzo de 2020 tras una resolución favorable al entonces presidente Donald Trump, por la Suprema Corte de Justicia, que envió al país a más de 60 mil solicitantes, quienes permanecieron en el limbo durante meses en la frontera.
Entonces, el gobierno republicano solicitó de manera urgente al alto tribunal que bloqueara el fallo judicial. En un documento, argumentó que, si esa orden entrara en vigencia, “un número sustancial de los hasta 25 mil extranjeros que están en espera de un proceso en México se apresurará de inmediato a ingresar a Estados Unidos”.
“Un aumento de esa magnitud impondría cargas extraordinarias a Estados Unidos y dañaría nuestras relaciones diplomáticas con el gobierno de México”, indicaron.
El programa terminará este 21 de enero, pero las actuales restricciones de viaje no esenciales por el Covid-19 seguirán en vigor, según un comunicado de la agencia.
“Todos los participantes actuales del MPP deben permanecer donde están, en espera de más información oficial de los funcionarios del gobierno de Estados Unidos", señaló.