El gobierno de México presentó ante un tribunal federal de Estados Unidos en la ciudad Boston, Massachusetts, una demanda civil de daños en contra de una decena de fabricantes de armas por facilitar "activamente el tráfico ilícito de sus armas a los cárteles y otros delincuentes en México".
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, enfatizó en la presentación del litigio, desde la Ciudad de México, que este hecho "sin precedente" es una demanda en la que se trabajó dos años contra "quienes producen las armas que están íntimamente vinculadas a la violencia en México".
Explicó que su objetivo es que las empresas compensen al gobierno mexicano "por daños causados por sus prácticas negligentes", por un monto económico que se determinaría en juicio, además de que se pide a las fabricantes que incorporen mecanismos de seguridad de esas armas y que "cesen prácticas negligentes que ocasionan daño en México, que ocasionan muertes".
Ebrard dijo además que se espera que, de ser ganada, esta demanda ayude a que se desarrollen e implementen estándares razonables para monitorear o disciplinar a los distribuidores de armas, porque las empresas "argumentan que cuando sale venta ya no tiene responsabilidad, pero sí la tienen".
El responsable de la política exterior de México aclaró que este proceso judicial no sustituye los esfuerzos que se realizan de manera conjunta para reforzar la frontera común contra el tráfico de armas, ni de las 17 acciones emprendidas de parte del gobierno mexicano.
Sin embargo, sostuvo que esta demanda es "indispensable" a fin de reducir la violencia y daños "que ocasionan muertes" todos los días, porque además, según él, las productoras y distribuidoras de armas desarrollan "modelos para narcotráfico para que las compren y son más valiosas".
En esa línea, el senador mexicano, Ricardo Monreal, calificó de "correcta, oportuna, valiente y justa" la querella presentada en Estados Unidos, al sostener que el incremento de la violencia "es un hecho sin precedentes".
"México no puede mantenerse ya callado ni silencioso", afirmó en la instancia.
La demanda fue presentada por los abogados Steve Shadowen, Richard M. Brunell y Jonathan E. Lowy, quienes expusieron que en la violencia generada por los cárteles de la droga en territorio mexicano están involucradas armas fabricadas en Estados Unidos y que son introducidas de manera ilegal.
"Casi todas las armas recuperadas en las escenas del crimen en México, del 70 al 90 por ciento, fueron objeto de tráfico de los Estados Unidos", subrayaron en la demanda.
Con información de Xinhua.