El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dio a conocer que dejará al Congreso de la Unión la decisión de mantener o eliminar el horario de verano de los husos horarios del país.

“La gente quiere que los representen personas con principios y con ideales, no politiqueros, la gente se da cuenta de todo, ya no es el tiempo de antes. Yo sí voy a seguir enviando iniciativas al Congreso porque tengo que cumplir. Por ejemplo, voy a enviar la iniciativa para que ya no haya el cambio de horario, la semana próxima, a cualquiera de las Cámaras”.

Hace una semana, el mandatario federal informó que mandaría un decreto presidencial para eliminar esta medida que está vigente desde 1996, pero finalmente, decidió dejar la última palabra al Poder Legislativo.

“Es mejor que sea una reforma a una de las leyes secundarias, para que no sea reforma constitucional, para la próxima semana presentamos la encuesta, lo que opina la gente y los estudios. A lo mejor desde hoy ya me contestan los del bloque, si lo van a aprobar, pero tengo que enviarla y así voy a seguir enviando”.

Desde Palacio Nacional, AMLO reveló que la próxima semana enviará su propuesta sobre el Horario de Verano sin dar mayores detalles sobre la iniciativa

El mandatario federal recordó que ya se cuentan estudios en materia energética y salud que exponen los riesgos para las personas y poco ahorro que genera este cambio horario.

De igual forma, López Obrador informó que la semana pasada, el gobierno federal, a través de la Secretaría de Gobernación (Segob), realizó una encuesta donde el 71% de los consultados dijo estar a favor de la eliminación del horario de verano.

Por otro lado, explicó la decisión de que sean los legisladores quienes decidan sobre la eliminación del horario de verano, es para combatir la “moratoria constitucional” que los partidos de oposición, PAN, PRI y PRD, han anunciado como estrategia electoral.

El Horario de Verano se instauró en 1996 en el sexenio de Ernesto Zedillo con la finalidad de aprovechar la luz solar en la temporada de otoño e invierno, además de buscar un ahorro de electricidad en los hogares mexicanos.

Desde su aplicación, diversos políticos y especialistas han cuestionado su viabilidad destacando los efectos negativos en la salud de la población.