Colectivos de madres buscadoras han expresado su descontento ante las recientes declaraciones de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la crisis de desapariciones en México.
Las activistas consideran insuficientes las medidas anunciadas y exigen ser incluidas en la formulación de políticas públicas que aborden la problemática.
En días recientes, Sheinbaum presentó reformas para unificar y fortalecer los registros de identificación y forenses de personas desaparecidas.
Estas medidas buscan mejorar la coordinación entre fiscalías y servicios forenses en todo el país, utilizando datos de la Clave Única de Registro de Población (CURP) y creando una Base Nacional Única de Información Forense. Además, se propone equiparar el delito de desaparición con el de secuestro y permitir la apertura inmediata de investigaciones sin esperar 72 horas.
Sin embargo, colectivos como el Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México, que agrupa a más de 86 organizaciones de 25 estados, han manifestado que estas iniciativas no son suficientes si no se cuenta con la participación activa de las familias afectadas.
Durante la conmemoración del Día Internacional contra la Desaparición, integrantes de estos colectivos instaron a Sheinbaum a emitir un posicionamiento oficial sobre la agenda de desaparición y víctimas en México.
Diana Gutiérrez, del colectivo Buscándote con Amor, expresó: "Le pedimos sensibilidad y claridad sobre quiénes serán las personas interlocutoras en la agenda de derechos humanos y desaparición para el siguiente sexenio".
Por su parte, la presidenta ha reiterado su compromiso con las víctimas y ha señalado que su gobierno siempre estará del lado de ellas. En respuesta a las críticas, Sheinbaum afirmó: "Siempre vamos a estar del lado de las víctimas, el dolor que puede sentir una madre o un familiar por una persona desaparecida es indescriptible".
Asimismo, destacó que su administración trabaja en mejorar las bases de datos, analizar contextos de desaparición, fortalecer la búsqueda en campo y profesionalizar las fiscalías.
A pesar de estas declaraciones, las madres buscadoras insisten en la necesidad de ser escuchadas y consideradas en la toma de decisiones. Argumentan que su experiencia y conocimiento en la búsqueda de sus seres queridos son fundamentales para diseñar estrategias efectivas que aborden la crisis de desapariciones en el país.
La situación se agrava con hallazgos recientes, como el descubrimiento de un rancho en Teuchitlán, Jalisco, utilizado por el crimen organizado para actividades delictivas, lo que ha intensificado las protestas y la presión pública.
Este caso ha subrayado la falta de acción y apoyo a las familias buscadoras, evidenciando la urgencia de medidas más integrales y participativas.
Las madres buscadoras continúan su lucha, demandando una política de Estado que garantice la búsqueda e identificación de sus desaparecidos, y esperan que el gobierno federal las incluya en la construcción de soluciones efectivas a esta problemática que afecta a miles de familias en México.
Con información de Proceso*